Con un mensaje de cuidado al ambiente, que asegura no puede darlo a conocer en su totalidad hasta que los ángeles le autoricen, Marcela Montaño Mancera permanece en el aeropuerto internacional de Cancún desde hace más de 10 días pero en cualquier momento podría ser trasladada al hospital psiquiátrico de Mérida.
Montaño Mancera cuya noticia ha trascendido por medios internacionales, es identificada por quienes laboran en el aeropuerto, basta con preguntar por ella y en seguida responden que la semana pasada estuvo en el edificio principal pero hace unos días se cambió a la Terminal Tres.
En ese sentido, fue entrevistado el vocero del Aeropuerto Internacional de Cancún, Eduardo Rivadeneira, quien explicó que el primer reporte que tuvieron de ella se registró es el lunes de la semana pasada, y “como aeropuerto lo que podemos hacer es monitorearla, tratar de saber dónde está, por dónde camina, con la doble intención de tratar de salvaguardar su integridad y al mismo tiempo la de otros pasajeros”.
El vocero resaltó que hasta el momento no ha agredido a nadie, no ha roto nada y tampoco ha robado, no ha hecho nada ilegal.
Y es que a decir del entrevistado sabe que es mexicana, tiene pasaporte del país y nació en 1968.
“Estamos tratando de buscar apoyo con las autoridades, hemos llamado al DIF pero no hemos tenido respuesta, no hay un centro psiquiátrico y no hay personal capacitado para atender a personas con ese tipo de padecimientos”.
El entrevistado añadió que “no es una persona que esté mal, lo que nos comenta nuestro servicio médico es que probablemente ella tiene un cuadro esquizofrénico que se controla con medicamentos, cuando los toma de manera regular es normal”.
En la Terminal Tres, entre numerosos turistas que llegan y se van es fácil reconocer a Marcela, está vestida de negro y al cuello trae tres cadenas delgadas con igual número de dijes plateados además de un rosario en color rojo, es del Arcángel Miguel, usa gafas oscuras que ocultan gran parte de su rostro y lleva sandalias con calcetas negras además de un bolso de gran tamaño en color miel.
Mediante pequeñas entrevistas con empleados del lugar, se sabe que se asea y peina en los baños del aeropuerto, además hay quien los primeros días la vio sacar dinero de un cajero automático o bien pagar con una tarjeta American Express lo que ya no ocurre y ahora varios restaurantes le regalan agua y comida.
Cabe resaltar que personal del aeropuerto contactó con el ex esposo de la mujer, quien vive en estados unidos pero que no se hace cargo de ella, pues al parecer se divorció hace más de año y medio.
La mujer ha viajado por varios países de Europa y América latina y habla inglés, griego e italiano, por supuesto español, también tiene por lo menos un título universitario y se ha desempeñado varios trabajos donde percibía un buen sueldo.
En algunos momentos del día es posible hablar con ella, pero su conversación no es coherente, pues dice que trae un mensaje de conservación del ambiente pero que no puede darlo a conocer por completo, porque necesita el permiso de los ángeles. Cuando habla de ángeles no necesariamente se refiere a seres espirituales, sino ángeles como personas que están entre nosotros.
“Es un lugar bonito (Cancún), había venido en el 99, nos quedamos mi esposo y yo en el Ritz Carlton y luego en el 2000 fue por una noche y salí hacia la Ciudad de México.En avión no llegué, llegué en el ADO, del puerto de Veracruz”.
Asegura que su casa está en California y que se la compró su esposo, luego añade “soy el ángel que dijo la biblia que iba a venir en el último capítulo 22, Apocalipsis o Revelaciones”.
Se informó que personal de la Casa de la Alegría gestionaba para trasladarla a Mérida donde hay un hospital psiquiátrico para que se le atienda, lo que podría ocurrir en las próximas horas.