*Este texto fue publicado originalmente en el semanario Presencia, editado en Cancún, en mayo de 1981.
Jorge Díaz Barrera, alto, delgado, 30 años aproximadamente, blanco, pelo castaño, piloto aviador, originario del Estado de Yucatán, desde muy joven se ligó a las actividades del contrabando de mercancías de Belice a Mérida. En la vecina colonia británica se conectó, al parecer, con destacados personajes de la política beliceña.
De fracasado comerciante de trajes regionales, pronto se convirtió en un individuo con gran solvencia económica. Adquirió casa en la playa de Cancún, y para sorpresa de sus conocidos, apareció al frente de la empresa Aerotaxis Bonanza y como vicepresidente de la compañía Belize Air Cargo.
Díaz Barrera siempre presumió a sus amigos de Mérida que la citada compañía de aviación era propiedad de George Price, primer ministro de Belice. También regenteaba un lujoso yate utilizado por prominentes funcionarios del gobierno federal y de la iniciativa privada para efectuar fiestas particulares en altamar, contratándose los servicios profesionales de modelos y de las llamadas “damas de compañía” de Estados Unidos y de Sudamérica.
Un amigo de su infancia, nos cuenta que Jorge Díaz Barrera, comenzó aproximadamente hace ocho años, sus viajes de manera constante a Belice, en un pequeño avión cuyo toldo era lona. Dos años atrás había sido alumno de la escuela particular de aviación “Albatros”, en la ciudad de Mérida, que posteriormente desapareció.
No eran pocos los que conocían las actividades ilícitas de Díaz Barrera, ya que él mismo se encargaba de no ocultarlas. Debido a su juventud, el repentino éxito económico lo deslumbró. Llevaba una vida de derroche, pero ambicionando con extender sus “negocios” a otros ámbitos.
En Mérida usaba un elegante Mercedes Benz con placas diplomáticas de Belice. Hacia alarde de su cercanía con el primer ministro George Price y de estar estrechamente ligado con él en diversos negocios particulares.
En Mérida y en Cancún llevaba amistad con diversos comerciantes, principalmente con algunos conocidos por sus “rumbosas fiestas”, pero que independientemente de lo mal habido de su fortuna, aparecían como prósperos hombres de negocios, respetables y respetados por su poder económico y su ascendencia social.
Díaz Barrera frecuentaba a los jefes policiacos de Mérida y Cancún. Se comenta que a un ex policía de Cancún le confesó que había matado a un estadounidense. “Lo metí a un baúl y desde mi avión lo tiré al mar”, aseguran que dijo.
Cuando llegaba al aeropuerto internacional de Cancún, algunos policías le checaban el kilometraje de su avión particular. En su casa de la playa organizaba fiestas y recibía visitas de extranjeros por demás sospechosos. Sin embargo, nunca fue molestado para ninguna averiguación. Un caso realmente curioso.
Una persona con la que platicó a fines del año pasado en la ciudad de Mérida, relató a este reportero que Díaz Barrera estaba conectado con cubanos anticastristas de Miami, con los que mantenía relaciones comerciales de todo tipo. Se asegura que ya pensaba inmiscuirse en el tráfico de armas a Centroamérica.
Hace aproximadamente un mes, abril de 1981, un diario de la localidad publicó la noticia de que al parecer Díaz Barrera había sido baleado en Houston al salir de un banco. Al mismo tiempo, en esta ciudad fueron detenidos tres individuos asociados a sus actividades delictuosas.
Cerca de Hopelchén, Campeche, se descubrieron varias hectáreas sembradas de mariguana, en las que este grupo había tenido participación. Todo indica que financiaban la siembra de mariguana y aseguraba la compra del total de la producción.
Después empezaron a surgir los rumores y las versiones. Que los sacos de mariguana encontrados en diversas ocasiones en las playas del norte de Quintana Roo, así como algunas avionetas encontradas en pistas clandestinas en medio de la selva, eran de Jorge Díaz Barrera. Pero él continuaba caminando por esta ciudad como Pedro por su casa.
A muchos de sus amigos y conocidos sorprendió la noticia de la supuesta muerte en Houston, de Díaz Barrera. Trascendió la versión a la prensa sin ninguna prueba convincente. Al darse a conocer públicamente la información, varias personas de Mérida se trasladaron a esta ciudad y contaron con todas las facilidades de la policía, para llevarse las pertenencias de Jorge Díaz Barrera. Extraoficialmente, este reportero se enteró de que en dicha casa encontraron una esmeralda valuada en 200,000 dólares.
En todo este asunto hay mucho de misterio y un penetrante olor a corrupción y encubrimiento. ¿En realidad fue asesinado en Houston Jorge Díaz Barrera? ¿Quién o quienes, en todo caso, son los culpables? ¿Quién dejó filtrar la noticia en Cancún?
Mientras tanto, una corporación policiaca de esta ciudad envió un oficio al FBI de la vecina nación norteamericana pidiendo mayores informes y fotos de la persona asesinada a las puertas del banco de Houston.
Las personas detenidas en Cancún aceptaron ser cómplices de Díaz Barrera en el tráfico de drogas. Los campesinos de Hopelchén están presos. Pero ha de haber todavía mucha cuerda de donde jalar.
Funcionarios policiacos y personas ligadas a este medio, coinciden en afirmar que Jorge Díaz Barrera y socios son simplemente un eslabón de la cadena del narcotráfico internacional de Sudamérica a Estados Unidos.
Es una noticia muy repetida que Belice continúa siendo un refugio de contrabandistas y mafiosos de toda laya. El gobierno de George Price ha acusado a sus opositores de estar financiados por la mafia de Estados Unidos. Sin embargo, Price también tiene negocios en el exterior y en su país lleva una vida austera y puritana.
¿Fue una pugna entre mafiosos lo que ocasionó la supuesta muerte de Jorge Díaz Barrera? ¿O simplemente desapareció antes que las autoridades lo detuvieran? Ojalá que la policía aclare este misterio.
¿Murió o simplemente desapareció Jorge Díaz Barrera?
La conexión Cancún en el narcotráfico internacional (II)
Contactos en Miami y Belice
Muchas personas en Mérida y en Cancún le deben favores a Jorge Díaz Barrera. Con habilidad y con un espíritu aparentemente dadivoso fue creando un circulo de complicidad que finalmente lo encerró en sus apretadas mallas.
A raíz de la misteriosa desaparición de Jorge Díaz Barrera, comenzaron a circular diversos rumores en algunos círculos que lo conocieron y tuvieron contacto con él. Hay un hecho inobjetable: Jorge Díaz Barrera fue, y quizá sigue siendo, un elemento importante en negocios turbios de Centroamérica a Norteamérica, La policía ya le conocía la pista pero, inexplicablemente nunca fue detenido.
¿Por qué aparentemente se le ha echado tierra al asunto? Un elemento policíaco comentó que: “En todos estos asuntos uno en realidad ignora la cantidad de intereses que están en juego, y qué personajes realmente están involucrados”.
Y refirió el caso de unos jovenzuelos detenidos en un restaurante de Cancún con cocaína. “No solo fueron inmediatamente liberados los jóvenes sino que los policías casi son cesados “. ¿Qué influencias se mueven alrededor de todos estos negocios sórdidos?.
En el caso de Jorge Díaz Barrera indudablemente que hay mucho mar de fondo que ojalá algún día salga a flote. Por nuestra parte, continuamos este reportaje aportando alguna información que hemos podido investigar. Resulta inobjetable que los presuntos socios de Jorge Díaz Barrera, a pesar de ser buscado por la policía y de estar detenidos varios cómplices suyos, contaron con todas las facilidades para vender los bienes que dejo en Cancún el desaparecido.
Por otra parte, varios de sus amigos y conocidos se mostraron escépticos respecto a su presunta muerte. Inclusive uno de ellos llegó a afirmar, en forma muy discreta que confidencialmente sabía que estaba viviendo en Santa Marta, California, E.U. Agregó que sus negocios en Cancún solo han cambiado de giro y que, inclusive, ha puesto en regla unos y piensa montar otros.
Lógicamente su nombre no aparece en ningún registro contable. ¿Quiénes son los actuales propietarios de Bonanza y de Belize Air Cargo, Inc.? En nuestra nota anterior afirmamos que Jorge Díaz Barrera era vicepresidente ce Belize Air Cargo, pero estábamos equivocados. En realidad fungía como presidente de la citada empresa.
La dirección en Miami, Florida es P.O. BOX520595, 33152. La otra es: 315 West 9th Street, Hialeah Fla. 33010. Teléfono: (305) 887-7635. En Belize la dirección que aparece es la siguiente: 5557 Baymen, Ave. Belize City, C.A. El teléfono es: 4754 y 4784. Seria interesante saber si las citadas direcciones continúan perteneciendo a las empresas de Jorge Díaz Barrera y quienes en realidad las manejan. ¿Con cuántos aviones contaba? ¿Quiénes son sus socios?.
Hasta ahora sus pistas en Cancún y en Mérida parecen haberse borrado. Alguien, sin embargo, dejó traslucir que sus jefes le ordenaron ausentarse de esta región en vista de que ya no estaba lo suficientemente “visto”. Otros aseguran que en realidad fue ultimado en Miami por haberse querido pasar de listo o por haber cometido un error de esos que se pagan caro.
Sus amigos de Cancún lo recuerdan como a un tipo generoso, que siempre estaba viajando. Apenas se enteraba de que alguno de sus amigos tenia problemas, sobre todo si eran económicos, él diligentemente acudía en su ayuda con respetables sumas.
A pesar de que todo mundo sabia que estaba involucrado en negocios turbios, todos se sentían orgullosos de su amistad. Frecuentaba los mejores bares y restaurantes de la ciudad, generalmente acompañado de guapas mujeres.
Jorge Díaz Barrera, muerto o vivo, logró burlar, por el momento, a la policía mexicana. Sin embargo, sus reales o supuestos contactos en Belice, así como de la influencia que siempre pregonó tener en ese país son aspectos que deben ser investigados a fondo.
Y mientras esto sucede, Presencia logró investigar que Bonanza y Belize Air Cargo, continúan siendo empresas manejadas, sino en forma directa por Jorge Díaz Barrera, sí por personas vinculadas a él.
Contradicciones, temores, sigilo, ocultamiento, ¿Algún día saldrá a la luz la verdad?-Presencia, mayo de 1981.