Rodrigo Navarro
En contexto
La industria fílmica, hacia la era del cambio climático
“¿Cómo llegue hasta aquí?, me siento perdida, sola y miserablemente inútil”, dice Slater Jewell-Kremker al comenzar su multipremiado cortometraje Una juventud inconveniente o indecente (An inconveniente youth), que parafrasea a su vez el documental de Al Gore, An inconveniente truth y que llevó al ex vicepresidente de EU a ganar, junto a los científicos del IPCC, el premio Nobel de la Paz en 2007. “El mundo es un lugar inmenso y me he metido en la cabeza que puedo salvarlo. Pero he comenzado a preguntarme si alguien en realidad puede hacerlo”.
Slater Jewell es una joven con 22 años de edad, hija de padres cineastas de quienes hereda la pasión por hacer películas y decide hacerse cargo de su propia educación desertando del sistema oficial de educación enfocándose en el cine y la música. Crece con la idea que los medios y el cine pueden cambiar el mundo, realiza su primera película a la edad de seis años, así que decide hacer su propio proyecto de medios de comunicación, la Fundación Visión Creativa, Creative Visions Foundation.
Slater nace en Los Angeles en 1992, a la edad de cinco años su familia se muda a Ontario y ahí ha crecido. “Si nos hubiéramos quedado en L.A. no habría podido ser la directora que ahora soy. Canadá es un país con mucha vida silvestre y eso ayudó a cultivar mi pasión por la naturaleza, pero igualmente es el país de las industrias mineras. También me atrae lo extraño y lo mágico en la vida”, me cuenta con alegre seriedad. Es una reconocida y premiada directora de cine, escritora, guionista y músico.
A los doce años comienza a hacer reportajes y corto metrajes para el proyecto My Hero y a los trece conoce a su héroe ambiental Jean Michel Cousteau en un campamento de verano en Isla Catalina, USA y hace un corto sobre su aprendizaje a bucear que incluyó, por supuesto, la preocupación por el ambiente. Lo presenta en el Festival de Cannes y obtiene gran renombre al ser seleccionado en la categoría de cortometrajes realizados por jóvenes entre más de siete mil proyectos en Mayo del 2007.
Dos meses antes la ONU le había reconocido con el premio Earth Trustee. Sus cortos realizados para My Hero, Paintig Peace y Peace Begins llevando un mensaje de esparcir la paz fueron escogidos finalistas para el Toronto Film Festival en la sección infantil del certamen. Peace Begins ganó el primer premio.
En 2008 es escogida para representar a Canadá en la Reunión Mundial de Jóvenes por el Clima en Kobe Japón en donde sacaron una declaración para presentarla en la Cumbre del Clima en Copenhague en diciembre de ese año.
“La reunión fue maravillosa, conocí e hice amigos con mis mismos ideales y deseos de salvar el planeta. Llegamos felices a COP15 pensando que solo entregaríamos la declaración a los gobernantes y nos harían caso. Es a nosotros a quienes nos van a afectar las decisiones que están tomando, así que teníamos mucho que decir”, me explica tras su participación en Film4Climate, en el Festival Internacional de Cine de Guadalajara en donde también participo.
“En Copenhague nuestra declaración tan solo sirvió para que los ministros se tomaran la foto y la archivaron. Fue en extremo decepcionante. No les importó el trabajo de 160 niños de todo el mundo. Estaba devastada y perdí la confianza en mis líderes (políticos). Los ministros anunciaron que no llegaron a ningún consenso y que tendríamos que esperar la solución al Cambio Climático, CC por otro año.
“Al año siguiente participamos en COP16 en Cancún. Cada reunión del Clima de la ONU es decepcionante, sin embargo acudimos año con año con la esperanza que esta reunión va a ser la buena, así que iremos de nuevo a París en diciembre para COP21”, me dice con la mirada profunda de sus ojos azul intenso. “Los premios y reconocimientos tan solo significan que estoy empujando para conseguir mis ideales, no me importa estar en las COP, en Cannes, en Toronto o ahora en Guadalajara. Me encantaría contribuir a vencer al CC”.
El Banco Mundial, BM es fondeador de proyectos fílmicos. Ha contratado para lanzar la iniciativa al productor Donald Ranvaud (un tipazo), quien fue el creativo del documental Connect4Climate y a Julia Braga Directora de Relaciones Exteriores y Coorporativas del BM (un ser maravilloso), de donde tomó el nombre para el proyecto Film4Climate que nos reunió a personas de todo el mundo para tratar de vender la idea a la industria fílmica (la segunda que produce más emisiones de CO2 a la atmósfera después del transporte) establezca estándares verdes de producción que reduzca su huella de carbono.
Para ello copiando el modelo de la industria en Bélgica se propone que el último 10% del financiamiento para películas (que en la mayoría de los caos representa casi el total de las utilidades) este condicionado al cumplimiento de esos estándares. Para ello durante cuatro días de trabajo nos reunimos, establecimos nuestra opinión y puntos y los discutimos. Finalmente concluimos con una declaración por escrito.
Conect4Climate es una iniciativa lanzada por el Banco Mundial y el ministro italiano de medio ambiente, quien nos ofreció a los participantes una cena de gala, para conectar y empoderar a las personas que están tomando acciones a favor del medio ambiente en todo el mundo. Tiene 200 socios alrededor del orbe: medios de comunicación, organizaciones académicas y sociales (ONG´s), grupos de jóvenes y sector privado.
Se asocia con el Festival Internacional de Cine de Guadalajara, FICG el más importante de América Latina para lanzar Film4Climate el primer forum verde de la industria cinematográfica para discutir que está haciendo la industria para combatir al Cambio Climático, CC.
En este marco trabajamos durante cuatro días y en especial dos en donde se hicieron los paneles de discusión. El lunes abrimos con una sesión de introducción con el Director del FICG Iván Trujillo, quien dijo que la industria debe comprometerse a reducir su huella de carbono. Después hablo Donald Raveneu, Productor Creativo de Connect4Climate para el Banco Mundial, quien explicó cómo nació Film4Climate.
Posteriormente Eduardo Santana Coordinador del Proyecto del Museo de Ciencias Ambientales de la U de G habló sobre el antecedente de esta sección de festival, que llegó a su 30ª edición, la muestra de cine Ambiental dentro del Festival desde 2009. Posteriormente Blanca Guerra director de IMCINE dijo que este asunto era muy importante y que iba intentar llevarlo dentro de las producciones nacionales.
En mi introducción dije que el cine es una excelente herramienta para la sensibilización y educación ambiental, porque produce sensaciones y sentimientos, que ha sido desperdiciada y cuando toca el tema lo hace con el desastre y el sensacionalismo. Si saca alguna conclusión es que el CC es inevitable y solo podemos adaptarnos a este. Faltaría el urgente mensaje de la prevención ahora, acciones individuales y colectivas para mitigar nuestra huella de carbono.
Bernardo Bertolucci el director italiano de cine, a Italia estaba dedicada esta versión del FICG, es la figura bandera de Film4Climate. No pudo asistir por motivos de salud pero se conectó vía Skype y comparó a los negacionistas del CC con los negacionistas del Holocausto nazi.
Vino después la mesa La sustentabilidad ambiental en la producción de películas que moderé. Al siguiente día dos mesas muy interesantes El Rol del cine en la sensibilización del CC y una llena de jóvenes entre los que estaba Slater, CC creatividad y el poder de la juventud. Si algo quedó claro es que los jóvenes no están muy contentos con lo que hemos hecho con el planeta ni con las decisiones que estamos haciendo.
La buena noticia es que se sacó el compromiso que propone el BM de establecer estándares para medir la huella de carbono de los filmes (un promedio de 400 ton métricas por película) y de reducir, mitigar y de ser necesario compensar los efectos socio ambientales en esta industria. Se hablara a los institutos y comisiones fílmicas para que lo adopten al condicionar el financiamiento del 10% final (las utilidades en la mayoría de las producciones) a cumplir con los estándares. Se adoptará tentativamente en el festival de Venecia y se llevara como propuesta de la industria a COP21 en Francia, Una excelente noticia y a nosotros nos toca que no se quede en el papel.