El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, y el jefe de la guerrilla de las FARC, Rodrigo Londoño Echeverri, Timoleón Jiménez o Timochenko, se comprometieron ayer, en su primer encuentro cara a cara, a firmar en un plazo máximo de seis meses un acuerdo que ponga fin a más de medio siglo de conflicto armado, tras sellar un pacto que crea una “jurisdicción especial para la paz”.
Este histórico acuerdo sobre justicia —el tema más sensible y complejo del proceso de paz— contempla la creación de un tribunal especial y juicios y penas de cárcel para responsables de crímenes contra la humanidad, toma de rehenes, ejecuciones extrajudiciales y violencia sexual de “todas las partes” del conflicto.
Quienes reconozcan su responsabilidad en crímenes y cooperen con la justicia tendrán penas de entre cinco y ocho años con beneficios carcelarios, mientras que quienes no lo hagan y sean declarados culpables enfrentarán hasta 20 años en una prisión común, según el documento firmado por los jefes negociadores de ambas partes, Humberto de la Calle (gobierno) e Iván Márquez (guerrilla).
Quienes lo reconozcan tardíamente pierden beneficios carcelarios, pero también son pasibles de penas de entre cinco y ocho años, según el documento.
“Hemos acordado que más tardar en seis meses debe concluir esta negociación y firmarse un acuerdo final” de paz, dijo Santos ante la presencia de Londoño y el presidente cubano Raúl Castro, como garante, junto con Noruega, del diálogo de paz iniciado en La Habana en noviembre de 2012.
“No va a ser una tarea fácil, porque faltan muchos puntos difíciles por acordar”, admitió Santos, quien indicó que el acuerdo de paz debe estar listo a más tardar el 23 de marzo de 2016.
Las FARC comenzarán a desarmarse a partir de 60 días después de la firma del acuerdo final para convertirse en movimiento político.
“Esos acuerdos sobre justicia representan un significativo paso de avance. Estamos ahora más cerca de lograr la paz que tanto anhela y merece el hermano pueblo colombiano. La paz en Colombia no solo es posible, es indispensable, pero requiere gran esfuerzo y voluntad lo que están demostrando las dos partes”, dijo en un breve mensaje Raúl Castro, luego de las intervenciones de Santos y Londoño.
Para este último, el acuerdo sobre justicia “sin duda generará ambiente propicio para avanzar sobre convenios en la restante temática de la agenda” de paz.
Destacó que este nuevo sistema de justicia ha sido diseñado “para todos los involucrados en el conflicto, y no solo para una de las partes” y “abre posibilidades de ofrecer verdad detallada y plena” sobre el conflicto armado, que ha dejado 220 mil muertos y seis millones de desplazados, según cifras oficiales.
Santos arribó ayer por la tarde a La Habana para reunirse con Londoño y Raúl Castro en salones de El Laguito, un complejo de residencias oficiales en el oeste de la capital cubana. Su viaje fue mantenido en secreto hasta pooco antes de arribar a Cuba, cuando en su cuenta de Twitter el presidente Santos dijo que “la paz está cerca”, al anunciar que se iba a detener primero en La Habana en su viaje hacia la Asamblea General de Naciones Unidas, en Nueva York.
El tema de la reparación de daños, que incluye el capítulo sobre justicia, fue objeto de largas negociaciones y reuniones con víctimas del conflicto armado colombiano y hasta hace pocas semanas parecía imposible que las partes lograran consenso.
Pero que lograran hacerlo “indica que el conflicto colombiano se terminó y estamos entrando en una fase de transición hacia el posconflicto”, opinó Jorge Restrepo, director del Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos de Colombia.
Los acuerdos fueron leídos por los diplomáticos Dag Nylander (Noruega) y Rodolfo Benítez (Cuba), en una ceremonia que incluyó a las delegaciones negociadoras y diplomáticos de Chile y Venezuela, acompañantes del diálogo.
El acuerdo fue logrado tres días después de que el papa Francisco dijera en Cuba, durante la misa campal en la Plaza de la Revolución en La Habana, que el proceso de paz en Colombia no podía permitirse “otro fracaso”.
El gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, comunistas) intentaron fallidas negociaciones de paz en el pasado, la última a finales de 1990 e inicios del 2000, que derivaron en una nueva escalada de enfrentamientos militares.
Hasta ahora las partes han consensuado tres de los seis puntos de la agenda y en los últimos ciclos de diálogo (van 41) venían discutiendo la reparación a víctimas.
Desde julio rige en Colombia una tregua unilateral de las FARC y el presidente Santos ordenó suspender los bombardeos a posiciones rebeldes. Las partes cerraron el tema de la reforma agraria, participación política de la guerrilla y drogas ilícitas. Además acordaron un programa de desminado y la creación de una Comisión de la Verdad.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, llamó por teléfono al presidente Santos para “felicitarlo a él y a sus negociadores por su coraje y compromiso con las conversaciones de paz bajo condiciones muy difíciles”, informó en un comunicado.
Calificó el acuerdo de ayer como un “avance histórico” hacia la paz, la cual, dijo, “está ahora más cerca que nunca para el pueblo colombiano y millones de víctimas del conflicto”.
También expresó su “hondo aprecio” por el papa Francisco, hoy en EU, por su “liderazgo moral y los buenos oficios del Vaticano en la búsqueda de la paz en Colombia”.
La Habana
22 meses de diálogo
- Noviembre 19. Se instala la mesa de diálogo con seis puntos. Humberto de La Calle lidera la misión oficial y Luciano Marín, Iván Márquez, la de las FARC.
- mayo-noviembre. Acuerdo parcial sobre desarrollo agrario y participación política de los guerrilleros desmovilizados al firmarse la paz.
- Febrero-junio. Escándalo por espionaje de la inteligencia militar a los negociadores. Tercer acuerdo parcial sobre drogas ilícitas. Reelección de Santos (2014-2018).
Julio-agosto. Inicia discusión sobre víctimas del conflicto, aún en curso. Víctimas dan su testimonio en Cuba. Se crea la Comisión Histórica del Conflicto y la subcomisión de militares y guerrilleros para cesar el fuego.
Septiembre. Más denuncias de espionaje. Las FARC acusan al ex presidente Álvaro Uribe (ultraderecha) de boicot.
Noviembre. Cese temporal del diálogo tras secuestro de un general por las FARC.
Septiembre. Primera tregua unilateral e indefinida de las FARC.
- Febrero-marzo. Las FARC renuncian a reclutar menores de 17 años. Acuerdan desminado. Santos suspende por un mes los bombardeos.
Abril 15. Un frente de las FARC mata a 11 militares. El gobierno reinicia los bombardeos.
Mayo 23. Los ataques dejan 26 guerrilleros muertos. Las FARC suspenden la tregua.
Junio 5. Se crea la Comisión de la Verdad.
Julio 12. Ultimátum de cuatro meses de Santos para decidir si se sigue con el diálogo.
Julio 20. Nueva tregua unilateral de las FARC; cinco días después Santos reordena la suspensión de bombardeos.
Septiembre 17. Las FARC se dicen listan para convertirse en movimiento político,
Septiembre 23. En Cuba, Santos y Timochenko ponen fecha para la paz: marzo de 2016.