Cancún.— A casi un mes de la reapertura de actividades, el director general del Consejo de Promoción Turística de Quintana Roo, Darío Flota Ocampo, reiteró que con la reactivación económica se trata de beneficiar a todos los que trabajan en la industria turística, que es la gran mayoría de la población del estado, no sólo los hoteleros.
El funcionario calificó el proceso, que comenzó el pasado 8 de junio, como una recuperación que avanza lenta, pero en forma ordenada, particularmente con el incremento de llegadas de vuelos nacionales e internacionales, que ya suman más de 70 diarias.
Asimismo, detalló, la ocupación hotelera promedio es cercana al 20 por ciento y señaló que en Estados Unidos han recibido muy bien la campaña de promoción turística “Caribe mexicano, lo mejor de dos mundos”.
Tanto la campaña como el proceso de reapertura han sido vistos con mucho interés para usarlos de modelo, porque todos quieren tener un regreso gradual y ordenado, como son los casos de Yucatán, Guerrero y Los Cabos, que monitorean el avance.
En entrevista para el noticiero matutino Origen, Darío Flota señaló que al entrar en vigor el semáforo epidemiológico y otorgar el color naranja a la zona norte, no fue necesario solicitar la declaración de actividad esencial para el turismo en Quintana Roo, como lo había previsto el gobernador Carlos Joaquín, pero los trabajos previos a la reapertura se hicieron estando aún en semáforo rojo.
Respecto al cierre de las playas públicas, el funcionario recalcó que “hay una confusión, porque nunca se habló de playas privadas”.
En el semáforo naranja todos los espacios públicos se cerraron para evitar aglomeraciones, como ocurrió con parques y campos de fútbol. Hay excepciones que se pueden regular, pero en una playa pública no se podría controlar como en un hotel, expresó.
“Utilicemos la prudencia y el sentido común para evitar que la enfermedad nos rebase”, manifestó.