Dicen que para que la cuña apriete tiene que ser del mismo palo. El conocido refrán queda como anillo al dedo en el caso del ex gobernador de Oaxaca Ulises Ruiz, recién desempacado como delegado del comité ejecutivo nacional del PRI en Quintana Roo.
Y es que en los días de mayor tensión en el estado, ocasionados por los bloqueos carreteros de los profesores que paralizaron los servicios educativos durante algunas semanas, se descubrió que activistas provenientes de Oaxaca se dedicaban a alentar el movimiento magisterial y eran los responsables de las estrategias de protesta.
Eran activistas, incluso, de la llamada Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), que paralizaron las actividades económicas en Oaxaca durante más de dos años, en la etapa final del gobierno de Ulises Ruiz, quien se negó a ceder a los chantajes de ese grupo y aunque se creó de él una imagen intolerante, dura, incapaz de negociar decidió confrontar a esos grupos, hasta recuperar los espacios invadidos.
En ese entonces se exigió la desaparición de poderes. Hoy Oaxaca vive el otro extremo, ahora se pide que aparezcan los poderes, porque la política tersa, la mano suave de Gabino Cué no ha podido resolver conflictos como el magisterial.
Así, con esos antecedentes aterriza en Quintana Roo Ulises Ruiz, quien rindió protesta como delegado el lunes por la noche. Llega a un estado en el que hay una amplia presencia de oaxaqueños que con los años se han integrado a las actividades productivas y a la sociedad quintanarroense, a la que enriquecen con sus costumbres.
Alcanza, se trepa al mismo escenario donde recientemente lo hicieron sus adversarios políticos, esos que llegaron a asesorar en su movimiento a los maestros quintanarroenses.
Quintana Roo no es desconocido para Ulises Ruiz. En 1999 estuvo aquí como coordinador de la campaña de Roberto Madrazo en la interna presidencial priista. El tabasqueño ganó en el estado. En las recientes elecciones locales también trabajó en la estrategia que permitió al PRI obtener el control del Congreso y recuperar municipios como Benito Juárez.
En 2015 habrá elecciones federales intermedias. La principal tarea de Ulises Ruiz será la de trabajar en la selección de tres candidatos a diputados federales, entre los que seguramente estará el próximo gobernador del estado.
Sin duda es una tarea complicada, pero la presencia en Quintana Roo de un político de ese nivel, con presencia nacional, es un mensaje de lo importante y estratégico que se ha convertido para el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto el estado que gobierna Roberto Borge Angulo.