Si le ‘compramos’ al Presidente de México Andrés Manuel López Obrador que “la vida pública cada día debe ser más pública”, ¿por qué entonces tenemos que enterarnos por otras vías, como la del hackeo a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), de asuntos que van desde la corrupción de algunos altos mandos militares (no todo el Ejército), hasta los viajes de la familia presidencial con escoltas como si fuesen el desaparecido Estado Mayor Presidencial?
Pareciera que desde las “Mañaneras”, que ahora quieren hacerla hasta los sábados y domingos, hayun adoctrinamiento y que no puedes estar en desacuerdo porque inmediatamente eres calificado(a) como neoporfirista, conservador, enemigo de México, corrupto, entre otros calificativos que antes le pertenecían al Gobierno y ahora quieren endilgárselos a la sociedad.
Pero ¿qué es lo que sucede en las Mañaneras? Simplemente hay una mezcla de verdad con un poco de mentira, de tal manera que los dichos y los “resultados” del Gobierno, sean presentados como si todo estuviese muy bien en el país y que vamos avanzando, aunque el bolsillo del ciudadano sea cada día más pequeño y lo que gana le alcance para pagar la mitad de sus gastos que tenía hace cuatro años.
Mezclar las verdades con la mentira no es nada nuevo, desde el Génesis bíblico satanás utilizó este método, pues dijo que “el día que comieren del árbol de la vida y la muerte, se les abrirían los ojos”, esa es una verdad, pero la mentira fue “y serán como dioses”, una mezcla que impactó en la mente de Eva. Así nos sucede a los mexicanos, es verdad que se construye un Tren Maya, pero no dicen cuántas veces han tenido que cambiar el presupuesto hacia arriba, o el trazo por no afectar intereses de amigos del Gobierno en turno; es verdad que la Federación construye una refinería, pero a costa del medio ambiente en un ecosistema muy vulnerable, como lo es el mar de Dos Bocas; es verdad que ahora las personas de la tercera edad, los discapacitados, los jóvenes y las embarazadas reciben el apoyo, pero no dicen de dónde viene ese dinero, y los que empezamos a trabajar desde los 90, que ya nos toca jubilarnos, estamos preocupados porque ya no hay dinero de nuestros ahorros, simplemente porque el Gobierno lo ha “invertido” en sus necesidades.
Ahora, con los “Sedena-paper” nos hemos enterado de la fragilidad de nuestro sistema, evidenciaron las mentiras del caso Ayotzinapa, la corrupción de la Policía Estatal en Tabasco con Hernán Bermúdez Requena; del viaje de la familia del Presidente López Obrador a Texas, así como de su delicada salud; además de la vigilancia que tuvo la doctora Beatriz Ramírez en playas del Pacífico, donde el Ejército movilizó un vehículo marino para cuidarla; entre otras muchas cosas como las y los políticos involucrados en el crimen organizado.
El Estado está vulnerable, porque dejaron de pagar por la seguridad cibernética, dejaron de invertir en Ciencia y Tecnología; dejaron de hacer obras para la Seguridad Nacional; pero al final de cuentas, la opinión que vale es la de usted respetado lector y lectora, que día a día observa como se “encoje” su dinero, que no le alcanza la quincena, que tiene que reducir su calidad de vida y pensar dos veces en qué gastar su dinero. Al tiempo…
SASCAB
En el marco de la celebración del XLVIII Aniversario de la conversión de Quintana Roo a Estado Liber y Soberano, tuve la oportunidad de entrevistar, junto con otros compañeros, al secretario de Seguridad Pública, Rubén Oyarvide Pedrero; lamentablemente las evasivas siguen siendo las mismas de cuando estaba en Benito Juárez (Cancún), desconoce la operatividad y cómo está la situación de la corporación. Comparecerá ante la Comisión de Seguridad, Protección Civil y Bomberos de la XVII Legislatura, pero solo en lo operativo, porque del dinero que invirtió el Gobierno pasado, pues no es su responsabilidad.