Cancún, 4 de enero.- El presidente honorario de la Asociación de Hoteles de Cancún, Isla Mujeres y Puerto Morelos, Abelardo Vara Rivera, dijo que la hotelería organizada ve con pesimismo el panorama para lo que resta de la temporada alta de enero a marzo tras un relativo buen cierre de año.
En opinión del ejecutivo, las reservaciones están muy por debajo de los porcentajes de ocupación, pese a los “números alegres” que el Gobierno siempre pretende ofrecer.
El hotelero estimó que el Caribe mexicano cerró 2020 con promedio anual de ocupación de entre 35 y 40 por ciento, pero con cuatro meses cerrados prácticamente por la pandemia.
“Pero ya sabes cómo maneja los números el gobierno, siempre ajusta los números para que sean alegres”, dijo irónico.
Datos del Sistema Nacional de Información Estadística del Sector Turismo de México (Datatur), señalan que la Ciudad de México bajó su tarifa media el año pasado 67.6 por ciento; los de Mérida 38.5; los de Cancún 36.1.
En Guadalajara, los números fueron del 34.8, por ciento y en Puerto Vallarta los descensos de precios fueron de 26.7.
Vara Rivera apuntó en ese sentido que los hoteles del centro de Cancún sufren porque los turistas prefieren pagar 20 o 25 dólares —de 397.62 a 497.02 al tipo de cambio del 3 de enero: 19.88 pesos) en la zona hotelera—, que pagar prácticamente lo doble (entre 50 [994 pesos] y 60 dólares [1192.85] al domingo) en uno del primer cuadro.
“Las tarifas promedio también están alrededor de 25 a 30 por ciento, por lo menos, más abajo que el año anterior, eso es indiscutible; los hoteles de cinco estrellas venden tarifas de cuatro o más baratas, mientras que las plataformas como Airbnb tienen todas las ventajas, no hay piso parejo con la hotelería formal”, sostuvo.
Así, los hoteleros enfrentan con incertidumbre las perspectivas para la temporada alta de enero a marzo, pues por primera vez las reservaciones están muy por debajo de los porcentajes de ocupación registrados durante la época baja, que va de septiembre a noviembre, agregó.
Por su parte, los principales emisores estadunidenses (el principal mercado para el Caribe mexicano y el país) señalan que con las reservaciones de última hora, que cada vez son una tendencia mayor, quizás se suavice esa caída, aunque se descarta por completo que la temporada alta mejore.
La recuperación total del flujo de turistas internacionales al país podría ocurrir hasta 2023, con la estabilización de las llegadas aéreas y que México reciba a cerca de 45 millones de visitantes extranjeros, según diversos análisis del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET) y la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA).