El astro Lionel Messi anunció su retiro de la selección argentina tras vivir una noche de pesadilla en la final de la Copa América Centenario, en la que erró su disparo en la tanda de penales ante el mismo Chile que lo amargó el año pasado.
“Ya está, se terminó para mí la selección argentina”, lanzó el crack de Barcelona como una bomba terminado el partido en el MetLife Stadium en East Rutherford, en Nueva Jersey, Estados Unidos.
Justo después de que Sergio Romero contuviese el tiro a Arturo Vidal, la ‘Pulga, en vez de encaminar la definición para su equipo, envió su remate a las nubes, permitiendo la recuperación de Chile, ganador 4-2 finalmente.
“Es un momento duro para mí y para todo el equipo, es muy difícil para mí seguir así, por todo, ya está, se terminó para mí la selección argentina”, dijo con serenidad.
Con 29 años recién cumplidos, el astro perdió con esta Copa América Centenario su cuarta final con Argentina desde 2007 y la tercera en tres años.
“Son cuatro finales las que me toca perder, tres seguidas, la verdad que es una mala racha que se me da, pero ya está, es mi decisión”, dijo.
“Pensándolo mucho en el vestuario, creo que ya está para mí la selección, ya se terminó. La peleé mucho, lo intenté, son cuatro finales y no pude ganarlas. Hice todo lo posible. Me duele más que a ninguno pero es evidente que no es para mí. Deseaba más que ninguno un título con la selección y lamentablemente no se me dio”, declaró el capitán de la albiceleste tras el partido.
Messi aseguró a los periodistas que ya tiene la decisión tomada.
“Ya tomé la decisión. Hice todo lo posible para intentar ganar algo y la verdad es que ya está. Ya lo venía pensando. Era ésta o ya está. Hice todo lo posible y no se me dio”, añadió.
Tras fallar el primer penalti de Argentina, el delantero del Barcelona se vino abajo, agachó la cabeza, comenzó a llorar y deambuló por el campo hasta que finalmente se consumó la derrota, sin que nadie pudiera consolarlo.
Líder de su selección y del Barcelona, ganador implacable de todo título posible con su club español (8 ligas, 4 Copa del Rey, 4 Ligas de Campeones de Europa, tres Mundiales de Clubes), llegó a Estados Unidos obsesionado con sacarse la profunda espina que tenía clavada.
Se había coronado campeón Mundial sub-20 en Holanda-2005 y había logrado la medalla de oro en los Juegos Olímpicos Pekín-2008, pero faltaba ese título ‘grande’ con el elenco mayor.
Como magro consuelo, le queda un nuevo récord, ya que en este torneo se convirtió en el máximo artillero histórico de la selección argentina con 55 goles, uno más que Gabriel Batistuta.
Una temporada difícil
La final perdida en esta Copa América arruina el reciente nuevo doblete Liga-Copa del Rey con el Barcelona y lo aleja de un sexto Balón de Oro de la FIFA, actualmente en sus manos por lo hecho en 2015.
También le impide el asalto final al reducido olimpo de las leyendas del fútbol integrado por Pelé, Diego Maradona y los fallecidos Johan Cruyff y Alfredo Di Stéfano.
Messi, ese ‘marciano’ de ‘Playstation’, sabe que no son suficientes la magia, los goles imposibles y los pases impensados que ha regalado en la última década, y que se debía una consagración con la camiseta nacional.
“Me duele mucho no ser campeón con Argentina, me voy sin poder conseguirlo”, confesó.
La nueva frustración tiene lugar además en un año difícil en el que sufrió un par de lesiones y tuvo que presentarse ante la justicia de España en una causa por evasión fiscal que ha manchado un poco su reputación.
La Copa América Centenario 2016 empezó empañada por ese caso y un fuerte dolor en la espalda que le impidió jugar en el debut de Argentina, justamente ante el rival de la final.
Sin embargo, desde su aparición en el torneo en la última media hora contra Panamá con una espectacular tripleta, los nubarrones se fueron disipando con goles y asistencias en los cuartos de final ante Venezuela y las semifinales frente a Estados Unidos.
En la final, Messi no tuvo un partido a la altura de las circunstancias y encima falló su penal, demasiado a su entender para buscar otra oportunidad con la albiceleste.