Una vez más el coronavirus nos pone a prueba y hay que afrontarlo con responsabilidad, lo cual implica redoblar esfuerzos en la aplicación de medidas y controles de bioseguridad, y continuar con los esquemas de vacunación, de lo contrario se pondrá en riesgo la economía de las familias quintanarroenses dijo el gobernador Carlos Joaquín González.
El mandatario estatal expresó que en todo el mundo la variante ómicron ocasionó un alza en los contagios, y el estado no fue la excepción por lo que fue necesario regresar al amarillo en el semáforo epidemiológico, como medida inmediata.
También admitió que está latente una disminución de vuelos, incluso en las últimas semanas se han tenido algunas cancelaciones por el elevado número de casos positivos de la tripulación en las aeronaves en varios países, algo que no se había tenido.
En voz de expertos, escuchó que la variante ómicron no es que sea menos dañina o letal, lo que pasa es que los niveles de vacunación han hecho disminuir esa situación, de ahí la importancia de continuar con las vacunas, algo que en Quintana Roo es de los estados con mayor cobertura.
“En varios lugares del mundo donde el 35% de la población no ha querido vacunarse es precisamente donde se han tenido mayores complicaciones y defunciones últimamente”, indicó al ser entrevistado por Radio Turquesa.
“Está abierta la posibilidad de que esos países cierran sus fronteras, aunque ya quedó comprobado que esa no es la decisión adecuada para afrontar la situación”, añadió.
Ante el actual panorama, invitó a la población a que, si no es necesario salir de casa no hacerlo y usar correctamente el cubrebocas, gel antibacterial, lavarse frecuentemente las manos y evitar las aglomeraciones.
“Hay que mantener los niveles de confianza, seguridad y protección para no ocasionar mayores contagios y perder los mercados”, agregó.
Con el retorno todo el estrado al amarillo en el semáforo epidemiológico, recordó que implica disminución de aforos y en el caso del transporte público señaló la necesidad de usar siempre el cubrebocas y procurar que dentro de las unidades se tenga buena circulación de aire, que no estén cerradas.