El equipo del republicano lucha por mantener vigente la prohibición de que personas de siete países de mayoría musulmana viajen a Estados Unidos, mientras que la justicia mantiene firme su suspensión.
De momento, la orden ejecutiva de Trump fue suspendida, por lo que personas con pasaportes de siete países pueden entrar nuevamente a EU.
¿Viajar o no viajar? De momento, la orden ejecutiva de Trump fue suspendida, por lo que personas con pasaportes de siete países pueden entrar nuevamente a EU. (Foto: Reuters)
El intermitente decreto inmigratorio del presidente de Estados Unidos Donald Trump volvió a los estrados tras un agitado fin de semana, cuando un tribunal de apelación decidió mantener en pie la suspensión temporal del mismo ordenada por un juez federal.
El decreto ejecutivo de Trump prohibe por 90 días la entrada a Estados Unidos de los ciudadanos de siete países de mayoría musulmana —Iraq, Siria, Irán, Libia, Somalia, Sudán y Yemen—, por 120 días la entrada de todos los refugiados, y restringe de manera indefinida la entrada de refugiados sirios.
Te ayudamos a ponerte al día en lo que ha pasado con una de las medidas más polémicas que ha tomado el nuevo presidente de Estados Unidos.
¿QUÉ PASÓ?
El viernes 3 de febrero, el juez federal James Robart, de la Corte del Distrito de Estados Unidos para el Distrito Oeste de Washington, suspendió de manera temporal y en todo el país el decreto inmigratorio de Trump.
Dos días después, el domingo, el poderoso Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito de San Francisco rechazó el llamado de emergencia del gobierno de Estados Unidos para restablecer la prohibición. Ese tribunal ordenó a ambas partes enviar sus argumentos a favor y en contra de la prohibición a más tardar el lunes en la noche.
La corte programó la exposición oral de argumentos para el martes 7 de febrero. Los abogados defendieron sus respectivas posturas ante tres jueces federales en una audiencia de casi una hora para determinar el destino inmediato de la suspensión decretada el viernes pasado. El fallo se conocerá posteriormente.
¿CÓMO LO HA TOMADO DONALD TRUMP?
Está enfurecido. A lo largo del fin de semana disparó varios mensajes en su cuenta de Twitter para demoler la decisión del juez Robart, y en uno de ellos se refirió al postulado por George W. Bush como “este supuesto juez”.
“¡La opinión de este supuesto juez, que esencialmente le quita el cumplimiento de la ley a nuestro país, es ridícula y será anulada!”, escribió en Twitter el pasado 4 de febrero.
What is our country coming to when a judge can halt a Homeland Security travel ban and anyone, even with bad intentions, can come into U.S.?
“¿En qué se convierte nuestro país cuando un juez puede detener una prohibición de entrada al país de Seguridad Nacional y cualquier persona, incluso con malas intenciones, puede entrar a Estados Unidos?”, fue el mensaje que publicó poco después.
Just cannot believe a judge would put our country in such peril. If something happens blame him and court system. People pouring in. Bad!
“Simplemente no puedo creer que un juez ponga a nuestro país en tal peligro. Si algo sucede, cúlpenlo a él y al sistema de justicia. La gente entra a raudales. ¡Malo!”, escribió este 5 de febrero.
El Departamento de Justicia de Trump envió una contundente respuesta, en la que enfatiza que suspender la aplicación del decreto inmigratorio “perjudica a los ciudadanos” y “cuestiona el decreto de seguridad nacional del presidente” en el contexto de la inmigración.
“(La decisión de Robart) viola la resolución del Congreso de que el presidente debe tener la autoridad inapelable de suspender la admisión de cualquier tipo de extranjero”, se lee en el alegato del Departamento de Justicia.
¿ESTÁ VIAJANDO LA GENTE?
La decisión de Robart suspendió la prohibición y el posterior rechazo de la apelación significa que ya no tiene ningún efecto, al menos hasta que el Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito de San Francisco tome una decisión.
Este domingo en la tarde, la recién graduada ingeniera de la Universidad de Clemson, Nazanin Zinouri, aterrizó por fin en el Aeropuerto Internacional Logan, Boston, después de viajar durante más de un día desde Teherán, Irán, a donde había ido de vacaciones desde Estados Unidos el 20 de enero, el mismo día de la posesión de Trump. Llevaba varios días en el limbo, sin saber si podría volver a entrar a Estados Unidos.
“Todavía no puedo creer que esto haya sucedido”, le dijo a CNN en el aeropuerto este domingo. “No creí que esto pudiera pasar pronto, está definitivamente más allá de cualquier cosa que hubiera podido imaginar”.
El senador republicano Lindsey Graham compartió la noticia de que se dirigía a Carolina del Sur con un mensaje en Twitter que decía: “¡Buenas noticias! Sé que tiene muchos amigos y compañeros de trabajo que no pueden esperar más para verla. Estoy feliz de que ya casi esté en casa”.