Parecía difícil sentados los precedentes, pero tras un trailer fuera de lo común que establecía un tono nunca visto en una peli de Marvel, medio mundo rezaba por que la última peli de Hugh Jackman como Lobezno no fuera un completo desastre como las anteriores.
El director de Logan fue también el responsable de Lobezno Inmortal, la última (y no tan acertada) aventura del personaje en la gran pantalla e hizo la firme promesa al actor de que le ayudaría a despedirse del personaje en condiciones.
Han cumplido. Como os digo en el titular, intuyo que Logan es una peli que ni Marvel sabía que podía llegar a hacer (y la peli que DC Cómics anda buscando y nunca consigue clavar).
En el año 2029 los mutantes están cerca de la extinción. Logan mantiene a Charles oculto y frena una enfermedad degenerativa que le hace perder el control de sus poderes y el gobierno anda tras la pista de una pequeña que forma parte de un experimento que se les fue de las manos.
Sin hablar de cómo llegan a formar piña, Logan, Charles y la niña acabarán siendo compañeros de viaje en la historia más seria, oscura y violenta que ha llevado la factoría Marvel a la gran pantalla.
Logan encuentra el tono perfecto y el equilibrio adecuado para su historia. Una historia que hace tragar saliva con fuerza, precisamente porque no para de desprender un fuerte olor a despedida que pone la mosca detrás de la oreja al espectador en todo momento.
El periplo hace evolucionar a su personaje a marchas forzadas y tiene una panda de villanos muy apropiada, con presencia y que sabe representar el peligro pero que en ningún momento intenta robar el protagonismo a los verdaderos protagonistas de esta historia.
Además, por primera vez Marvel y Fox entienden al personaje que tienen entre manos de verdad y actúan en consecuencia con la clasificación de edad para la película: Rated R en EE UU o Mayores de 18 en España.
Lobezno es salvaje y por mucho que intente contenerse cuando se le buscan las cosquillas se le encuentran. En Logan las cabezas ruedan, los miembros vuelan y las garras atraviesan de verdad, con las salpicaduras de sangre que conlleva (creedme, Deadpool era para niños al lado de Logan).
Logan es la mejor película de Marvel que he visto. He salido del cine encantado el día del estreno muchas veces; saciado, sin faltas ni quejas; pero con Logan la sensación va a más.
Me encuentro recordando escenas concretas en ocasiones, diálogos, volviendo a ver el trailer ya vista la película y las ganas de volver a verla (en el cine) empiezan a aparecer (raro para mí en pelis de superhéroes).
Marvel impresiona con este trabajo y demuestra que puede llevar a sus personajes a donde necesiten.
Los Guardianes de la Galaxia son todo risas, los Vengadores buscan el equilibrio y el entretenimiento constante y Logan consigue contar una historia seria y adulta que, insisto, creo que ni ellos sabían que podían contar.