Hacia 1981, es decir, hace 35 años, un tiempo muy corto en la historia de las ciudades, la llamada colonia Puerto Juárez albergaba casi el 80% de la población total de Cancún, un destino, se decía entonces y a veces hasta ahora, “integralmente planeado”.
Un diagnóstico de esa época reflejaba esta realidad: “asentada en 253 hectáreas, ha crecido desaforadamente, presentando en la actualidad diversos problemas entre los que destacan: la regularización de la tenencia de la tierra y los nuevos asentamientos ilegales; la falta parcial de servicios básicos como agua potable, energía eléctrica, pavimentación y la falta total de sistema de drenaje…
“Atraída por la creciente inversión en la zona turística, la colonia Puerto Juárez ha ido asentando la gran corriente de crecimiento humano que ha sobrepasado todas las previsiones, acumulando problemas que en la actualidad requieren de inmediata solución…”
“La población se fue asentando en el costado Sur de la carretera Mérida-Puerto Juárez y en la Zona Norte. Asentamientos irregulares desde el momento en que los terrenos pertenecían al ejido de Isla Mujeres…”
“Para solucionar el problema de la ilegalidad en la tenencia de la tierra, el gobierno federal cede al gobierno de Quintana Roo una superficie de 767.60 hectáreas para la formación del fondo legal del poblado de Puerto Juárez.
“En consecuencia, el Gobierno del Estado dio a conocer el 4 de julio de 1975, la cesión de que había sido objeto y procedió a la regularización y titulación de los terrenos comprendidos en esta zona, con el fin de llevar a cabo la urbanización integral de toda Ciudad Cancún…”
“Para lograr los objetivos planeados, el Gobierno del Estado afectó el Fideicomiso Traslativo de Dominio e irrevocable, un terreno de 104 hectáreas que formaba parte de la cesión descrita, ubicada en el municipio de Benito Juárez…”
“En los cálculos previstos para 1981, la población total de la zona urbana debería sumar 28,500 habitantes. Sin embargo, la construcción de cuartos de hotel rebasó en más de un 50% los pronósticos de inversión, de tal suerte que para 1981 se tenían unos 3,482 cuartos de hotel, 923 cuartos de villas y condominios y 105 lotes residenciales que generan más de 7 mil 500 empleos.
“Si se considera un empleo por cada familia de cinco miembros, que es el promedio nacional, tenemos una población estimada de más de 37,500 habitantes en el año 1981…
Este panorama cambió, pero la herida del desorden no ha cicatrizado.