A este gobierno ya no le dará tiempo para llevar a cabo la reforma constitucional con la finalidad de que desaparezcan los órganos autónomos. Eso genera mucha polémica y “los del bloque conservador no aprueban nada”, afirmó hoy el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Hay cosas que van a quedar pendientes, pero ojalá se siga desmontando la estructura burocrática, facciosa, sectaria y contraria al interés nacional”, sostuvo en su conferencia en el salón Tesorería de Palacio Nacional.
Lo que sí se hará es la reforma eléctrica y la electoral. “A ver qué pasa”, señaló e insistió en que organismos como la Comisión Federal de Competencia o el Instituto Federal de Telecomunicaciones deberían desaparecer porque son estructuras que se crearon para facilitar la privatización, el despojo de bienes nacionales.
Explicó que una reforma completa a la Carta Magna era un asunto que se planeaba concretar como parte de la Cuarta Transformación, porque hace falta una reforma administrativa. Pero “ya no se puede, ya no podría hacerlo”, admitió.
No obstante, el gobierno federal optó por hacer reformas que ya se han concretado, entre otras, la prohibición a la condonación de impuestos, que la corrupción sea delito grave, la revocación del mandato y quitarle los fueros al presidente. Ahora puede ser juzgado como cualquier ciudadano y por cualquier delito.
Otra reforma profunda fue elevar a rango constitucional el derecho a la pensión a los adultos mayores, a niños con discapacidad, el derecho de los jóvenes de familias pobres a recibir una beca. También se hizo la modificación para garantizar el derecho a la atención médica y medicamentos gratuitos. Ya están en la Constitución, subrayó el mandatario.
A la pregunta sobre las propuestas que debe enviar el titular del Poder Ejecutivo para reemplazar a dos comisionados que concluyen sus cargos en Cofece e IFT, López Obrador informó que se están revisando los posibles candidatos para que esos organismos continúen.