Manipulación perversa

Hay intereses perversos que quisieran que a Quintana Roo le vaya mal. Manipulan los hechos delictivos que han sucedido para acomodarlos a una visión catastrófica previamente armada con esos fines. Los hechos delictivos están a la vista y son preocupantes, pero Quintana Roo no vive una espiral de violencia como el catastrofismo alimentado desde las sombras pretenden hacer creer.
Las cifras indican que Quintana Roo, durante los sexenios de Félix y de Beto vivió hechos delictivos más duros e impactantes. Eso no significa justificar los hechos de estas semanas, sino tratar de ponerlos en su justo contexto. Magnificarlos con una visión incendiaria es hacerle el juego a los mafiosos que quisieran una sociedad temerosa, pasiva, confundida.
Quintana Roo está viviendo una nueva etapa política que intereses aviesos del pasado inmediato quisieran frustrar. Una nueva etapa de civilidad política en la que no se reprime a nadie y se respeta a todos.
La actividad turística atraviesa por su mejor momento, lo que quedó demostrado en el tianguis turístico que se celebra en Acapulco. Se consolida el Caribe mexicano como líder en materia turística de México y Latinoamérica. Pero hay quienes quisieran que viniera la debacle, que todo se fuera por la borda.
Desde las cavernas se conspira políticamente contra el gobierno de Carlos Joaquín. Sienten afectados sus intereses. Añoran los tiempos de impunidad y de saqueo.
Los hechos están a la vista. Quintana Roo se encuentra entre los cinco estados más seguros del país. Yucatán se encuentra en el 14. Pero la percepción es que Yucatán es más seguro que Quintana Roo. Percepción alimentada desde el bunker de los enemigos del progreso y la estabilidad de nuestro estado.
No se trata de defender al gobierno de Carlos Joaquín, sino de defender la imagen de Quintana Roo que se pretende distorsionar por quienes por doce años se desentendieron de la seguridad pública de esta entidad.
Esos son los datos duros. La seguridad no tuvo prioridad en los doce años pasados. Las instituciones de seguridad pública estuvieron en el más completo abandono. Los recursos federales destinados a la seguridad en el estado y en los municipios fueron malversados. Fueron robados, simple y llanamente. Lo que la sociedad espera es que no haya impunidad. Que se castigue a los responsables de haber propiciado el desmantelamiento de la secretaría de seguridad pública.
La canalla interesada en desprestigiar y afectar a Quintana Roo utilizando los reprobables hechos delictivos, no deben seguir con su deleznable actitud de confundir y manipular.
Correo: jorgeg512@hotmail.com

Twitter: @JorgeG512

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