En cada campaña electoral los rumores están a la orden del día. Versiones surgen y versiones se diluyen. Es el pan nuestro de cada día. Los rumores y los chismes son parte del quehacer político. Hay quienes se sorprenden, por ejemplo, de que Mauricio Góngora lleve una campaña modesta, a ras de tierra, con pocos “espectaculares” y que no haga derroche de mantas y carteles en las calles, ni realice grandes concentraciones de gente.
Mauricio así es. La tónica de su campaña será la tónica del gobierno que propone. La austeridad como estilo de vida privada y pública. En los tiempos actuales el dispendio es reprobable y, por lo tanto, mal visto por los electores.
Esto entra en contraste con el estilo de Carlos Joaquín, quien ha reconocido que aceptó donativos de vuelos privados por un costo de un millón 200 mil pesos. Esta campaña contrastante entre la austeridad y el derroche es lo que marca el tono de esta campaña por el gobierno del estado.
Un estilo austero de alguien que ha logrado ascender política y profesionalmente merced a su esfuerzo personal, y el otro estilo de quien todo lo ha tenido por ser parte de una familia poderosa en lo económico y en lo político.
Mauricio pertenece a una familia de clase media que ha trabajado siempre para salir adelante. Sus padres no son poderosos económicamente, como si lo son los Joaquín. Esta es una diferencia que puede parecer nimia, pero es relevante. Porque infancia es destino.
Mientras tanto, las campañas van. Las encuestas también. Pero lo importante es la gente. Lo importante son los ciudadanos que el cinco de junio van a decidir el futuro de Quintana Roo. Ellos van a decidir entre un candidato que camina, que toca puertas y que difunde sus propuestas, y otro que viaja en avión y, el colmo, “de gorra”. Pero esos “donativos” le salen caros al Estado, porque los propietarios de esos aviones luego son beneficiados con contratos de obras o con otro tipo de concesiones.
LAURA FERNÁNDEZ
Si hablamos de políticos que se han hecho a sí mismos, no podemos dejar de mencionar a Laura Fernández, una mujer que ha escalado posiciones por su talento y su esfuerzo. Para Laura nada ha sido fácil. Su camino en la política no ha estado exenta de escollos, pero nada la ha detenido. Ahora, como candidata a la presidencia municipal de Puerto Morelos está demostrando empuje y voluntad de articular propuestas ciudadanas para el nuevo municipio. Correo: [email protected]
Twitter: @JorgeG512