México, DF. Un dispositivo semejante a una caja de un televisor, que no hace ruido y es capaz de generar energía eléctrica suficiente para abastecer las necesidades de una casa, sin usar combustibles, agua ni elementos atmosféricos, es posible gracias a un singular desarrollo de científicos mexicanos.
¿Cómo lo hicieron? Los ingenieros del Corporativo Jhostoblak, desarrollaron un sistema que funciona mediante un movimiento de turbinas de quinta generación, el cual se produce por efecto de no atracción de campos continuos electromagnéticos, es decir, cuando se tratan de juntar dos fuerzas del mismo polo, es evidente que se repelen. El proceso es constante y, aunado a la ruptura de los principios de la ley de la fuerza y la potencia, permiten la producción de energía eléctrica limpia las 24 horas de los 365 días del año.
“En términos sencillos, todo es movimiento perpetuo a partir de imanes que van acoplados de forma secuencial, armónica y de manera estratégica para hacer funcionar a otros que son del mismo polo. Entonces, al tratar de no pegarse entre sí se crea una fuerza que hace que las turbinas giren con firmeza para producir energía eléctrica por medio de un generador especial”, explican los miembros del equipo.
Con la implementación de esta tecnología pueden resolverse los problemas de suministro energético, las alteraciones por picos de generación de electricidad, reducir el costo de mantenimiento de los equipos que usan energía y disminuir el efecto por calentamiento global, así como la quema indiscriminada de elementos fósiles, aseguran los entrevistados.
Asimismo, subrayan que este producto, denominado Sistema EGS, tiene la capacidad de contribuir con la generación de energía eléctrica que actualmente se produce en las plantas hidroeléctricas, termoeléctricas, solares y eólicas. Detallan que el equipo es pequeño, pero genera la energía suficiente para abastecer una casa con refrigerador, televisión, horno de microondas, estufa, calentador de agua y computadora, entre otros aparatos.
La capacidad mínima de producción del dispositivo es de cinco kilowatts por hora (120 al día), cantidad suficiente para abastecer 12 casas de vivienda media superior. Y la máxima es un mega por hora (es decir 24 Megas al día), con lo que pueden cubrirse los requerimientos de una gran población o un municipio.
Por otra parte, explican, no provoca campos magnéticos ni radiación alguna para procesar la energía eléctrica, la corriente alterna y la directa; y la instalación sólo requiere conectar los dos cables que van a la línea del servicio eléctrico al equipo. Cabe destacar que la tecnología está protegida bajo secreto industrial en Estados Unidos y, en corto plazo, obtendrá el mismo tipo de registro bajo la tutela de Suiza. Además, se desarrolló hace 20 años, tiempo en el que los ingenieros han manufacturado prototipos, los cuales han sido perfeccionados hasta llegar al actual.