México se ha convertido en el país con la visión más pesimista de América Latina en cuanto a inflación, según la última encuesta de Grupo Ohla. El 64% de los ejecutivos mexicanos anticipa un aumento en los precios durante los próximos seis meses, una perspectiva que contrasta con el optimismo moderado que prevalece en otros países de la región.
La encuesta, que incluyó a 475 ejecutivos C-Level de 21 países, revela que más de la mitad de los líderes empresariales en América Latina espera un alza en los precios en el corto plazo. Sin embargo, México destaca como el país con la perspectiva más negativa, superando a naciones como Colombia (51%) y Argentina (22%), donde las expectativas son menos alarmantes.
Mientras México lidera el pesimismo, Perú se posiciona como el país más optimista, con el 50% de sus ejecutivos proyectando estabilidad en los precios. Argentina, por su parte, muestra un notable cambio de actitud: el 66% de sus ejecutivos espera mejoras económicas en el corto plazo, un giro radical frente a las expectativas negativas de 2023.
Ante este escenario, las empresas mexicanas ya están tomando medidas. El 59% de los ejecutivos en la región planea ajustar sus estrategias de marketing, con un enfoque en innovación de productos (25%) y publicidad digital (19%). Además, el 41% de los encuestados cree que la rentabilidad mejorará en 2025, aunque en México esta cifra es más baja debido a la cautela generada por la inflación.
Antonio Monckeberg, CEO de Grupo Ohla, comentó: “México enfrenta un desafío particular con la inflación, lo que podría impactar el consumo y las decisiones de inversión en los próximos meses. Sin embargo, es crucial que las empresas mantengan una visión estratégica y se adapten a este entorno volátil.”
Aunque el optimismo empresarial crece en gran parte de América Latina, México se mantiene en alerta por la inflación.