Ciudad de México. La reciente incorporación del exsenador panista Jorge Luis Lavalle al gabinete de la Gobernadora de Campeche, Layda Sansores (Morena), ha generado polémica y señalamientos de un posible “pacto de impunidad”.
Marko Cortés, exdirigente nacional del PAN, criticó duramente el nombramiento de Lavalle como Secretario de Desarrollo Económico, destacando que este movimiento evidencia una estrategia para “doblegar” opositores y ofrecerles protección política.
“Es vergonzoso cómo el régimen morenista incorpora a quienes se doblegan y ahora los hace parte de su equipo de Gobierno. Esto demuestra un pacto de impunidad. Si lo perseguían políticamente o si tenía delitos que pagar, ahora queda claro que todo fue perdonado o negociado”, declaró Cortés en entrevista.
El nombramiento de Lavalle ocurre mientras este enfrenta un proceso judicial por asociación delictuosa, lavado de dinero y cohecho, derivado de las acusaciones de Emilio Lozoya, exdirector de Pemex. Según Lozoya, varios senadores panistas, incluido Lavalle, habrían recibido sobornos para aprobar la reforma energética impulsada durante el gobierno de Enrique Peña Nieto.
Cortés también señaló que las acusaciones de Lozoya y los procesos contra figuras opositoras han sido utilizados de manera mediática y política por el actual gobierno:
“Al final, no hicieron nada contra Peña Nieto. Todo esto es mediático, una persecución para acallar voces opositoras y sumar gente sometida al régimen”, añadió.
El nombramiento de Lavalle como parte del gabinete morenista ha sido visto como una incongruencia dentro de Morena, partido que ha basado gran parte de su discurso en la lucha contra la corrupción. Analistas y críticos sugieren que este movimiento podría socavar la credibilidad del partido en su combate a la impunidad.
Por su parte, ni la Gobernadora Sansores ni Jorge Luis Lavalle han emitido declaraciones sobre las acusaciones o los cuestionamientos a su reciente nombramiento.