La Auditoría Superior de la Federación (ASF) determinó que la compra de la planta de Agronitrogenados, por medio de una empresa de Petróleos Mexicanos (Pemex) llamada Pro Agroindustria en diciembre del 2013, se hizo a un costo inicial de 275 millones de dólares, pero se elevó a 760 millones de dólares porque más de la mitad de la planta no servía
El informe refiere: “La adquisición de la planta de fertilizantes no se realizó con las mejores condiciones de precio y calidad”.
Entre las irregularidades detectadas están que 60% de las instalaciones vendidas por Agronitrogenados eran inservibles y deberían ser cambiadas, no se hizo una evaluación de las condiciones de la planta antes de la venta porque, según los vendedores, se perderían las garantías pese a que llevaba 14 años sin operar.
En una segunda auditoría, ya no sobre la compra sino sobre la rehabilitación de la planta, se concluye que PMI Comercio Internacional, que es la entidad que tenía el proceso en sus manos, no cumplió con las disposiciones legales y normativas aplicables para el trabajo.
La ASF encontró deficiencias en el proceso de evaluación de las propuestas, falta de control del presupuesto y de los tiempos estipulados en el contrato de rehabilitación, falta de experiencia de la empresa creada para producir fertilizantes.
La Auditoría encontró reducción de metas y aumento del monto contratado sin justificación, no consideró integrar nueva tecnología, no justificó aumentos en los costos, no especificó las responsabilidades de las partes, no hay permisos ambientales, no participó el tecnólogo propietario de la ingeniería para identificar los alcances con un grado de certidumbre adecuado, no se demostró el cumplimiento de la normativa respecto al uso de asbesto en la techumbre de almacenes y falta la documentación que soporte los pagos.
La compra y rehabilitación se justifican con un análisis entregado el 31 de octubre del 2013 por Booz & Company, que determinó que un estimado de inversiones, entre compra y arreglos, por 442 millones de dólares era viable y recomendó la reactivación de Coatzacoalcos y la operación integrada de Cosoleacaque.
La auditoría se terminó en enero pasado y la planta no está en operación pese a que las fechas de inicio de operaciones serían noviembre del 2015 y abril del 2016. De acuerdo con el análisis de la cuenta pública del 2015, a la inversión inicial para la adquisición de la planta de fertilizantes de 275 millones de dólares se le deben de sumar obras de rehabilitación por otros 200 millones, con lo que el total de la compra inicial ascendió a 475 millones.
Sin embargo, en agosto del 2015, PMI Holdings autorizó un incremento de 285 millones de dólares para la rehabilitación, este monto es 142.5% más de lo previsto inicialmente; el costo total del proyecto aumentó hasta 760 millones.
Pemex investiga caso Odebrecht
La Unidad de Responsabilidades de Pemex investiga desde diciembre pasado todos los contratos celebrados entre la petrolera mexicana y la empresa brasileña Oderbretcht y sus filiales, admitió la empresa.
La investigación y análisis de los contratos se inició luego de que la empresa brasileña admitió en las cortes de Estados Unidos que efectuó sobornos por 10.5 millones de dólares para conseguir obras en México.
La investigación la inició la Secretaría de la Función Pública el 23 de diciembre del 2016, dos días después de que el Departamento de Justicia de los Estados Unidos hizo pública la sanción impuesta a la empresa brasileña Odebretcht por actos de corrupción en diversos países. La multa que va a pagar la empresa es por 3,500 millones de dólares.
Un mes después, el 25 de enero pasado, Pemex presentó una denuncia de hechos ante la Procuraduría General de la República (PGR) en contra de quien resulte responsable, por los posibles actos delictivos ocasionados en su contra por Odebretcht.
Las declaraciones hechas por Odebretcht en Estados Unidos no especifican el nombre del o de los funcionarios que fueron sobornados, en el acuerdo admiten el soborno a funcionarios del gobierno mexicano por un monto 10.5 millones de dólares y que de ese monto seis millones de dólares fueron “para un alto funcionario de una empresa controlada por el Estado”.
“Con respecto a las investigaciones en torno a la empresa Odebrecht, Pemex reafirma su compromiso de llegar hasta las últimas consecuencias, actuando con la mayor prontitud y apego a la legalidad. Para la administración de Petróleos Mexicanos la transparencia, la rendición de cuentas y el combate a la corrupción son valores fundamentales”, señala la empresa.