Un ataque de seis carreras en el segundo rollo, respaldo el pitcheo de Andrés Meza, que trabajó a lo largo de seis entradas, permitió a los Pericos de Puebla quedarse con el triunfo por pizarra de 7-5, sobre los Tigres de Quintana Roo, en el segundo juego serie y de paso agenciarse el liderato de la zona Sur de la Liga Mexicana de Béisbol.
Con el de este miércoles, Tigres tiene cuatro juegos más disputados que Puebla, 94 contra 90, pero los Pericos cuentan con menos derrotas, 39 contra 41, por lo que ligeramente tienen un mejor porcentaje, .567 contra .564 de los quintanarroenses.
Debajo de ambas novenas, a dos juegos y medio, se encuentran los Delfines de ciudad del Carmen.
Tigres se fue al frente en la pizarra con par de carreras en el primer inning, la primera la anotó Gorkys Hernández, al aprovechar una pifia de Alberto Carreón en las paradas cortas, después Carlos Sievers sacó sencillo al central para impulsar la otra anotación.
Pericos reaccionó de forma violenta en el segundo rollo, con racimo de seis anotaciones; Valentín Gámez dio la voz de ataque con sencillo productor al izquierdo, después Mario Iván Santana se encargó de empatar el juego con hit al derecho; Alberto Carreón se ponchó con la casa llena, sin embargo el receptor Jesús Espinoza no pudo quedarse con la esférica, y esto lo aprovechó Gámez para anotar desde tercera; Ángel Berroa se encargó de fabricar dos más con doble al izquierdo, y otro wild pitch, ahora de Francisco Villegas, permitió que Alberto Carreón registrara la sexta carrera emplumada.
Tigres aun anotó en la con rodado productor de Ricardo Vázquez en la cuarta entrada, y bambinazos solitarios de Esteban Quiroz y Ricardo Vázquez, en el sexto y octavo rollo respectivamente.
Pericos agregó una más con cuadrangular, sin gente a bordo de Sandy Madera, el dominicano la voló por todo el prado izquierdo.
La victoria se la llevó Andrés Meza, con labor de seis entradas completas, permitió nueve hits y cuatro carreras, dos de ellas sucias, dio un pasaporte y ponchó a tres enemigos. La derrota fue para Jaime Espinoza, y el rescate fue para el venezolano Pedro Rodríguez.