José Cabalán Macari Álvaro, Secretario de Competitividad, Trabajo y Desarrollo Económico de Puebla, informó que la planta Volkswagen del estado realizará paros técnicos para evitar despidos de los empleados, reportó la prensa local, luego de que la automotriz se ha enfrentado a nivel mundial a demandas y señalamientos por modificar motores de 11 millones de unidades para ocultar emisiones de gases contaminantes.
“Van a seguir trabajando, por su puesto que harán paros técnicos como lo han hecho en otras ocasiones, pero lo importante es que están buscando no mover a ninguno de los empleados”, afirmó Macari a la prensa.
Los paros técnicos normalmente son programados entre empresa, autoridades laborales y por los mismos trabajadores. Se labora con horarios más cortos para disminuir la producción y a la vez evitar despidos.
En México, Volkswagen tiene plantas en Cuautlatcingo, Puebla y en Silao, Guanajuato. La poblana representa el motor de la economía en la entidad que es gran dependiente económico del sector automotriz.
Los paros responden al golpe que ha recibido Volkswagen a nivel internacional debido a que recientemente se descubrió que la empresa cometía fraude con los medidores de contaminantes. Fueron truqueados para esconder los niveles de emisiones dañinas que cada auto emite a la atmósfera.
La empresa, cuya probabilidad de quiebra se disparó a 25 por ciento, da trabajo a aproximadamente 78 mil personas sólo en el estado gobernado por Rafael Moreno Valle; de este total de plazas, 18 mil son empleos directos y 60 mil indirectos. En Silao laboran alrededor de 600 personas de manera directa.
Es decir que el escándalo de Volkswagen podría afectar a cerca de 80 mil trabajadores mexicanos, ya que desde su llegada a México es una de las empresas que más genera empleos en el país.
De acuerdo con e-consulta, los paros técnicos son usuales en la ensambladora alemana ante bajas en su producción y, en ocasiones, afectan el salario de los trabajadores. Sin embargo, Cabalán subrayó que, por ahora, la firma automotriz no prevé la reducción de salarios, pero detendrá la fabricación de unidades en cuanto se registre una eventual baja en la demanda.
Moreno Valle es consciente que el próximo año la demanda de autos será menor luego del escándalo mundial (aunque, enfatizó, en la planta local no se produjeron esas unidades). No obstante, dijo, sigue en pie la inversión de mil millones de dólares para fabricar la nueva Tiguan y otros millones para el Audi Q5 porque, confirmó a la prensa local, pues piensa “fundamentalmente en los trabajadores”.
Esta semana, Volkswagen México dio a conocer que alrededor de 32 mil vehículos de la empresa fueron vendidos en México del 2009 a agosto del 2015 “que potencialmente podrían estar incluidos en la lista de motores diésel de la serie EA189 sujetos a investigación”. Hace una semana la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) notificó que 11 motores estaban señalados con ese problema.
“Se trata exclusivamente de vehículos equipados con motores diésel de 4 cilindros, específicamente los modelos Transporter 2.0 TDI, Amarok 2.0 TDI, Vento 1.5/1.6 TDI, Jetta Gen. 4 (Clásico) 2.0 TDI, Bora 2.0 TDI, Nuevo Jetta Gen. 6 2.0 TDI, Audi Q3 2.0 TDI (hasta modelo 2015) y Audi A4 2.0 TDI. Todos estos vehículos han sido homologados en México de acuerdo a la normatividad mexicana vigente”, detalló la compañía en un comunicado.
Volkswagen, cuyo director renunció, se enfrenta a investigaciones en EU y en Alemania por la manipulación sistemática durante años de los motores diesel EA 189 para trucar las emisiones de gases nocivos para la salud. En el mundo hay 11 millones de autos trucados repartidos entre las marcas Volkswagen, Audi, Seat, Skoda y Vehículos Comerciales.