Empezar a hacer ejercicio puede resultar muy difícil, no sólo porque es complicado encontrar tiempo para hacerlo pero porque si nuestros músculos no están acostumbrados al movimiento, comenzar una rutina diferente puede provocar dolor. Pero en realidad puede que el dolor muscular en el ejercicio no necesariamente signifique que está funcionando.
¿Por qué los músculos empiezan a doler cuando hacemos ejercicio?
En realidad, el dolor que experimentamos tiene mucho que ver con el cerebro y la repetición. Hacer un movimiento al que nuestro cuerpo no está acostumbrado significa que nuestros músculos se mueven de una manera diferente al estirarse y contraerse, por lo cual, esto nos empieza a costar mucho trabajo.
Seguramente haz escuchado que sentir dolor al siguiente día de hacer ejercicio significa que nuestros músculos están creciendo, pero esta idea no es necesariamente correcta. Generalmente, cuando nuestro cuerpo duele significa que algún músculo está experimentando inflamación, pero lo más común, es que ésta desaparezca con el tiempo. Es por eso que ese dolor no está directamente relacionado al crecimiento muscular.
Otro significado del dolor en los músculos después del ejercicio
Puede ser que el dolor muscular durante y después del ejercicio esté ligado a alguna lesión. Muchas veces no sabemos cómo realizar ciertos movimientos adecuadamente y esto puede ser peligroso para nuestro cuerpo ya que en lugar de ejercitar los músculos, en realidad estamos dañando nuestra salud o “despertando” antiguas lesiones.
Es por eso que lo más importante al hacer ejercicio es estirar previo a comenzar una rutina. Un estiramiento a los músculos que planeamos estimular durante el ejercicio puede ser la mejor manera de evitar dolor y daño muscular. Procura estirar al menos 5 minutos antes de comenzar tu rutina y por lo menos 10 después de finalizarla. Al inicio, enfócate en despertar tu cuerpo y prepararlo para los movimientos que va a realizar.
Otra buena medida puede ser iniciar el entrenamiento diario con una rutina de bajo impacto. Este tipo de ejercicios generalmente son mucho más sensibles e incluyen movimientos que ayudan a evitar el daño a tus articulaciones.