Nueva York, una de las ciudades más importantes en todo el mundo, es también una de las más afectadas por el Covid-19. Hasta el jueves 26 de marzo, los casos confirmados contabilizaban 37.000, mientras que el número de hospitalizaciones y muertes también aumentaba. Pero, ¿cuáles son los motivos por los cuales esa gran urbe acogió tan bien al nuevo coronavirus?
De acuerdo con el gobernador Andrew Cuomo, la cifra de fallecidos en su ciudad ascendió hasta los 365 este jueves y el panorama es desalentador, pues los expertos señalan que este número aumentará. “Es una situación en la que la gente simplemente empeora con el tiempo, eso es lo que estamos viendo”, señaló con pesar el político.
Hasta ayer, más de 5.300 pacientes se encontraban hospitalizados, lo cual representó un crecimiento del 40% con respecto al miércoles, y casi 1.300 se encontraban en la sala de cuidados intensivos, lo cual también presenta una crisis para los hospitales que deben enfrentarse a ello en medio de la escasez de insumos como mascarillas y ventiladores mecánicos para asistir la respiración de las personas.
Algunas de las razones por las cuales Nueva York se convirtió en uno de los epicentros de la epidemia de Covid-19 son la numerosa afluencia de turistas provenientes de todas partes del mundo, la densidad poblacional y la necesidad de las personas de moverse en el transporte público.
Sin embargo, un elemento que también contribuyó a que los contagios en la ciudad se extendieran de manera tan relevante fue la tardía reacción para detectar los primeros casos. Benjamin Cowling, profesor de epidemiología de enfermedades infecciosas en la Universidad de Hong Kong, dijo para el New York Times que hubo una introducción temprana y no detectada del virus en la ciudad, probablemente a mediados o fines de enero.
Después de que esos primeros casos llegaran, la densidad de la población fue uno de los elementos que aportó a su veloz expansión. No obstante, ese crecimiento explosivo no ocurrió en otras ciudades como Tokio, Seúl o Taipei, donde la cantidad de gente en las calles o en el transporte público es similar a la neoyorquina.
Otra de las razones por las cuales el crecimiento es tan elevado en Nueva York es que ahí se estarían aplicando un mayor número de pruebas de coronavirus. Parecen “estar probando más agresivamente que en muchos otros lugares”, señaló al mismo medio el doctor Jon Zelner, epidemiólogo de la Universidad de Michigan.
Además, otra explicación se orienta en el sector de la población al cual se le están realizando pruebas para la detección del virus. En un inicio se realizaban a quienes presentaban síntomas típicos de la enfermedad, pero después se aplicaron a las personas mayores, las cuales son más propensas a presentar los síntomas y a enfermar gravemente.
Desde la perspectiva de Donald Berry, un estadístico en centro de cáncer MD Anderson, consultado por el mismo medio estadounidense, lo realmente importante no es el número de casos que se presentan, sino los grupos que afecta y cómo se propaga la enfermedad entre las personas que los conforman.
“Cuando ves un caso, ves muchos casos”, señaló el especialista, quien asume que el problema respecto al análisis de la expansión del coronavirus no debe realizarse caso por caso, sino grupo por grupo, pues estos son los que pueden contribuir a la propagación rápida y aleatoria.
Para aminorar el número de contagios en Nueva York, los especialistas son conscientes de que aún deben descubrir cuáles son los factores que tienen más relevancia, pero definir eso ha resultado un proceso de suma complejidad. “Tenemos más especulaciones que hecho”, aceptó el doctor Arnold Monto, profesor de epidemiología y salud global en la Universidad de Michigan, al New York Times.
Mientras los casos aumentan, las autoridades deben buscar distintas formas para poder tratar a los pacientes. Este jueves, por ejemplo, Andrew Cuomo, anunció que los hospitales podrán atender a dos personas con un mismo ventilador bajo el objetivo de hacer un mejor uso de los suministros frente a la epidemia.
De esta forma, el hospital presbiteriano de Nueva York logró desarrollar un protocolo en donde utilizan un ventilador para dos personas, mismo que fue compartido con el Departamento de Salud del estado, el cual se encargó de aprobar la práctica, según el portal informativo ABC News.
Aunque Cuomo calificó a la técnica como una poco convencional, también expresó que sería de alta utilidad. Agregó que serviría mucho, pues según estimados del estado los hospitales necesitarán hasta 30.000 ventiladores en las próximas semanas.
El estado cuenta con aproximadamente 5.000 a 6.000 ventiladores, cuyo uso será ayudar a los contagiados de Covid-19 a respirar cuando no lo puedan hacer por su cuenta. Además compraron 7.000 máquinas más y recibieron 400 ventiladores de la reserva del gobierno federal.