CANCÚN, 22 de mayo.— El gobernador Carlos Joaquín González apuntó hoy que la propuesta de la diputada Dolores Padierna, del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en el sentido de eliminar Fondo de Desastres Naturales (Fonden) ha causado preocupación extrema en los estados y municipios porque se perdería la posibilidad de acceder a recursos indispensables para paliar desastres naturales.
La noticia llega cuando estamos por comenzar la temporada de huracanes, apuntó. Tardamos muchos años en mejorar y perfeccionar la operación del Fonden, los famosos atlas de riesgos, y en profesionalizar su uso y hoy corremos el riesgo de perderlo y eso ha causado preocupación extrema, sobre todo porque hay otros temas que nos “pegan”, como el rechazo a los proyectos de aprovechamiento de energías alternativas.
“Vienen momentos complicados en materia económica”, advirtió el Gobernador, quien dijo que varias veces le han preguntado si solicitará un crédito y que los mismos diputados esperan que lo haga, pero no es su intención.
“Solamente en el caso de querer encontrar una forma de recuperación económica, de mejor nivel, en el que haya inversión en infraestructura municipal, podríamos aplicar un financiamiento, si lo hubiera, para permitir un mejor desarrollo de la economía. Esa sería la única manera de hacerlo, pero hasta hoy la inversión se ha cubierto con disminución de programas que ya teníamos”, destacó.
El jefe del Ejecutivo del Estado recordó que en la compra de 625 mil despensas para ayudar a la población más vulnerable se han gastado “muchísimos millones de pesos” y falta otro tanto de la segunda etapa de entrega. Además, se ha ayudado a la gente con vales para la compra de gas butano y se está buscando la forma de hacerlo con los recibos por consumo de energía eléctrica, “que vinieron brutalmente altos, con una gran cantidad de errores”.
Al respecto, destacó que envió una carta a la Comisión Federal de Electricidad porque “en un mismo día recibí 12 llamados de diferentes municipios porque les llegaron recibos por sumas de entre 20 mil y 40 mil pesos y cuando fueron a la CFE se los resolvieron y quedaron en mil 800-2 mil pesos”.
Ahí destinamos 50 millones de pesos para contribuir al paso del 68 por ciento de los recibos de energía eléctrica, invertimos en gas, mantenemos el trabajo de CAPA sin ingresos y pagando sueldos del personal, equipos, herramientas, energía eléctrica, prosiguió. También llevamos medicamentos hasta su casa a personas de grupos vulnerables, un gran logro, más de mil hogares en esta última semana. Todo eso requiere una cantidad importante de recursos.
También recordó que, desde antes de la covid-19 se empezaron a recibir menor participaciones federales y estaban por entrar las alarmas y los fondos de estabilización para alcanzar por lo menos niveles de ingresos similares a los propuestos a principios de año, continuó. Con todo esto la recaudación disminuyó totalmente y las participaciones podrían caer hasta en 89 mil millones de pesos en el país.
En ese sentido Carlos Joaquín insistió en que, con seguridad, entrarán los fondos de estabilización, pero hay dudas sobre el tiempo que podrán brindar apoyo, lo que seguramente podría ser por lo que resta del año para mantener los niveles presupuestados originalmente, porque “no van a dar para más”.
Asimismo, señaló que se trabaja en la búsqueda de más recursos que permitan tener un fondo de estabilización durante 2021, que también será un año difícil, a fin de que el Estado “se mantenga en un nivel adecuado en cuanto a los recursos que obtiene”.
También reconoció que hay preocupación por las complicaciones para encontrar soluciones, sobre todo porque hoy, a diferencia de lo que sucedía antes, no se puede recurrir a Hacienda para solicitar apoyo.
De hecho, recordó que también fue necesario empezar a cortar programas y nómina, pese a que la idea era no recortar personal, mantener a la plantilla de gobierno y tampoco solicitar créditos adicionales. “En ese sentido, soy muy responsable he tratado de llevarlo hasta lo último, pero el tema preocupa”.
Por último, anticipó que se avecina una etapa crucial: la convivencia externa con el coronavirus, el regreso a la actividad económica, la búsqueda del control de cada uno de los sectores de la economía para no caer en rebrotes y el consecuente aislamiento. “El 1 de junio se reanudarán las actividades en el campo y en la industria de la construcción, siempre que en estos días nos mantengamos en casa, para ir adelante en la reconstrucción de la economía del Estado, anteponiendo el cuidado de la salud”.