Washington.— El panorama en la Unión Americana por el Covid-19 aún es desalentador: autoridades alertaron ayer que es probable que el número de contagios en el país sea 10 veces superior a la cifra de casos confirmados; además, Texas pausó su desconfinamiento por el alza de enfermos y hospitalizaciones.
A diferencia de Europa y partes del Este de Asia, Estados Unidos nunca bajó de su pico de infecciones. Mientras otras naciones pueden prepararse ya para una segunda ola del virus, la más afectada del mundo todavía está experimentando la primera.
Actualmente, hay unos 2.3 millones de casos confirmados en Estados Unidos, pero, de acuerdo con el nuevo estimado de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés), la cifra real sería de unos 23 millones. Este cálculo se ha extraído tras examinar muestras de sangre en todo el país en busca de la presencia de anticuerpos de coronavirus. En tanto, la Universidad Johns Hopkins eleva el número de pacientes confirmados a más de 2.4 millones.
“Una mayoría significativa de los estadounidenses, superior a 90%, es susceptible de contraer Covid-19 al no ser inmune (…) El aumento de casos entre jóvenes es el principal causante del incremento en partes del sur y el oeste del país”, detalló el director de los CDC, Robert Redfield.
A su vez, el gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció ayer que esa medida ayudará a la demarcación a controlar la expansión de la enfermedad “hasta que seamos capaces” de entrar en la siguiente fase de la apertura económica.
El repunte se concentra en las áreas metropolitanas de Houston y Dallas, así como en las ciudades de Austin, San Antonio y El Paso.
“Estamos concentrados en estrategias que frenen la expansión del virus, al mismo tiempo que permitimos que los texanos continúen ganando sus salarios para apoyar a sus familias”, explicó el mandatario.
Texas cuenta con 4 mil 389 pacientes hospitalizados por la afección, frente a los 2 mil 793 de hace una semana, según datos del Departamento de Salud estatal.
Asimismo, es uno de los estados en el sur y oeste del país, junto con Florida, Arizona y California, que está experimentando un alza en medio del proceso de reapertura económica que está provocando preocupación entre las autoridades médicas.
Desempleo, sin freno
Los despidos por la crisis en Estados Unidos continuaron la semana pasada con 1.48 millones de nuevas peticiones de subsidios por desempleo, según cifras del Departamento de Trabajo que sugieren que la recuperación del mercado laboral será lenta.
En el plazo terminado el pasado 20 de junio, el rubro se ubicó por encima del nivel de 1.25 millones que esperaban los analistas. Desde marzo, el número total de pedidos de ayuda de trabajadores en la Unión Americana asciende a 47.2 millones.