La Justicia argentina determinó ayer el procesamiento de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015) en una causa que investiga presuntas irregularidades en contratos de venta de futuros de dólar en el Banco Central (BCRA) en el tramo final de su mandato, informaron fuentes judiciales.
Claudio Bonadio, titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal No. 11, dictó el procesamiento de la ex mandataria por el delito de “administración infiel en perjuicio de la administración pública, en el marco de la causa por el dólar futuro”, explicó el Centro de Información Judicial (CIJ).
También procesó al ex ministro de Economía Axel Kicillof, al ex titular del BCRA Alejandro Vanoli y a otros 12 imputados, y ordenó activar un embargo sobre sus bienes por un monto mayor de un millón de dólares.
El caso se inició por la denuncia de parlamentarios integrantes del frente Cambiemos, liderado por el actual presidente argentino, Mauricio Macri.
Según los denunciantes, mediante la celebración de contratos de futuros de dólar el Banco Central habría vendido dólares a un precio que rondaba los 10.65 pesos por unidad, por debajo del precio establecido en la Bolsa de Nueva York para este tipo de contratos (entonces alrededor de 14 pesos por unidad).
Bonadio entiende que, de la diferencia entre el precio pactado y el del mercado, se desprende que por los contratos cerrados (septiembre a diciembre de 2015) el Banco Central registró una pérdida de 105.5 millones de dólares.
A ello deberían sumarse las pérdidas derivadas de la ejecución de contratos entre enero y junio próximo.
En el auto de procesamiento, el juez señaló ayer que es impensable que una operación financiera de esta magnitud, en la cual en menos de 45 días hábiles se abrieron posiciones del Banco Central de 5,000 a 17,000 millones de dólares “y que tendría claros efectos económicos y políticos en un futuro inmediato, sea desarrollada sin la aprobación expresa del más alto nivel de decisión económico y político del Poder Ejecutivo Nacional”.
Es así que justifica el procesamiento de Cristina Fernández y Kicillof.
“Resultó evidente que la entonces presidente d impartió instrucciones —que sin duda fueron elaboradas conjuntamente— a su ministro de Economía para que esta operación financiera se lleve a cabo”, añade Bonadío.
Añade además que Kicillof procedió a su vez a impartir directivas a los funcionarios del BCRA y “por supuesto” a los directores de la Comisión Nacional de Valores (CNV), “todos los cuales”, resalta el magistrado, eran totalmente intercambiables en caso de disidencia con la orden, o en el caso de ser remisos al acatamiento.
(Agencias)