El cáncer es una enfermedad que va en aumento a nivel global y es considerada como una de las principales causas de muerte. En México durante 2018 se registraron más de 190 mil casos nuevos y más de 83 mil personas fallecidas, y de acuerdo con diversos estudios en México, las muertes por tumores malignos se han incrementado debido al crecimiento y envejecimiento poblacional.
Uno de los tipos de cáncer con mayor mortalidad, es el cáncer de pulmón, neoplasia que comienza en los pulmones y se puede diseminar a los ganglios linfáticos o a otros órganos del cuerpo, como el cerebro. El cáncer de pulmón en nuestro país registra más de 7,800 nuevos casos al año y provoca casi 7 mil muertes durante el mismo periodo. El cáncer de pulmón se divide en dos principales tipos, el de células pequeñas y el de células no pequeñas, siendo este último el más frecuente.
“Hay diversos factores de riesgo que pueden aumentar la posibilidad de desarrollar cáncer de pulmón, entre ellos el tabaquismo, la exposición al humo de segunda mano, al humo de leña, exposición al gas radón, al asbesto y otros carcinógenos y tener algún antecedente familiar de cáncer de pulmón. Es importante mencionar, que esta neoplasia por lo general no produce signos ni síntomas en los estadios más tempranos, pero sí suelen aparecer cuando la enfermedad ya está avanzada, algunos de éstos son: una tos que no desaparece, tos con sangre, falta de aire, dolor en el pecho, entre otros” indicó el Dr. Max Saráchaga, director médico de Amgen México.
El cáncer de pulmón tiene diferentes abordajes médicos para su tratamiento, dependiendo del tipo de cáncer y de qué tan avanzado esté. Las personas con cáncer de pulmón de células no pequeñas pueden ser tratadas con cirugía, quimioterapia, radioterapia y/o terapia blanco.
Al respecto el Dr. Saráchaga, comenta: “es muy importante que el médico tratante busque realizar una prueba de biomarcadores que puede informar sobre el funcionamiento anormal o normal de las células, evolución del tumor, y ayudar a predecir la posible respuesta del tumor ante un plan de tratamiento específico.”
Uno de los genes más estudiados en estas pruebas son los genes RAS, que son los oncogenes mutados más frecuentes en cánceres humanos. Dentro de esta familia la variante más prevalente y especialmente frecuente en tumores sólidos es una mutación especifica denominada KRAS, esta mutación está presente en el 13% de los Cáncer de Pulmon de Células No pequeñas, entre el 3 y el 5% de los cánceres colorrectales y entre el 1 y el 2% de muchos otros tumores sólidos.
“La proteína KRAS ha sido considerada un blanco “intratable” durante cuatro décadas, lo que ha dejado a los pacientes con opciones de tratamiento limitadas. En Amgen, nuestra misión es servir a los pacientes y ofrecer más opciones de tratamiento, por ello, hemos investigado y desarrollado un inhibidor de la proteína KRAS, y en tan sólo dos años hemos obtenido datos alentadores sobre su eficacia y seguridad en una gran variedad de tumores” concluyó el Dr. Saráchaga.