El presidente Donald Trump anunció el lunes la distribución en Estados Unidos de 150 millones de pruebas rápidas para detectar COVID-19 en 15 minutos, un método comparable a las pruebas de embarazo y mucho más rápido que las pruebas moleculares utilizadas desde el inicio de la pandemia.
“Este es nuestro plan: se enviarán 50 millones de pruebas para proteger a las comunidades más vulnerables”, como los hogares de ancianos, dijo Trump.
El mandatario añadió que los 100 millones de test restantes serán utilizados para asistir a estados y territorios en la reapertura de sus economías.
Cada prueba tiene un valor de 5 dólares para el gobierno federal.
Los expertos de salud han solicitado por meses el uso de estas llamadas pruebas antigénicas económicas para permitir que las personas se las realicen a sí mismas varias veces a la semana según sea necesario, y obtener un resultado casi de inmediato.
Por su tiempo de respuesta, estos kit tienen una ventaja obvia para frenar la propagación del virus, pero también tienen un inconveniente: son menos sensibles que las pruebas PCR y, por lo tanto, es más probable que arrojen falsos negativos.
Esto se debe a que las pruebas de PCR utilizan equipos de laboratorio sofisticados capaces de detectar trazas del material genético del virus.
Pero al tardar alrededor de una semana en dar un resultado, una prueba PCR no es tan significativa a nivel clínico ya que para entonces, los pacientes ya se han recuperado o se han enfermado más.
Por otro lado, las pruebas de antígenos (nombre que se le da a las sustancias que, al instroducirlas en un organismo animal, dan lugar a reacciones de defensa, como la formación de anticuerpos) funcionan mejor cuando una persona tiene una gran cantidad de virus en la nariz, que probablemente sea también el punto en el que son más contagiosos.
Las pruebas rápidas utilizan una tira de papel que contiene anticuerpos contra el coronavirus que reaccionan cuando tocan la proteína del pico del virus, similar a cómo una prueba de embarazo casera reacciona a las hormonas.
Sin embargo, las pruebas de antígeno pueden requerir una confirmación adicional mediante una prueba de PCR, particularmente si una persona da negativo pero parece tener síntomas, ya que esto podría significar que la mayor parte del virus ha migrado del sistema respiratorio superior al inferior.
Algunos expertos han pedido que las pruebas rápidas estén disponibles para uso doméstico, pero por ahora, los pacientes aún necesitarán visitar a profesionales de la salud para que se las realicen.
Fuente: Informador