CANCÚN.- París, la ciudad del amor, no aguantó más las prácticas de muchos enamorados, pues desde junio pasado las autoridades parisinas decidieron prohibir la colocación de los llamados candados del amor en los barandales del puente de las Artes, el viaducto más emblemático de la capital francesa, debido a que se consideró que el peso de esos artefactos eran un riesgo para la estabilidad de la estructura de la mencionada plataforma.
Los candados colocados por las parejas de enamorados parisinos y extranjeros fueron removidos no solo ante el temor de que el peso de los símbolos románticos ponga en peligro la estructura del siglo XIX, sino porque además “echaban a perder la estética del puente, son estructuralmente malos para el mismo y pueden causar accidentes”.
Fue un dilema que finalmente resolvieron las autoridades parisinas y es una similar al que se enfrentan gobiernos municipales de otra capitales europeas, como Roma, Londres, Madrid y Moscú, donde incluso se ha planteado instalar estructuras destinadas a la colocación de los candados del amor.
Cancún, uno de los principales destinos de boda en el mundo, no escapa de la tradición de los enamorados de colocar esos candados y han elegido el puente Nichupté, a la altura del hotel Calinda, para instalarlos.
Aún son pocos como para representar algún riesgo para el puente más antigüo de la zona hotelera, pero algunos de los que han sido colocados datan de hace poco más de 12 años, según las inscripciones impuestas en ellas.
Lograrán los enamorados que llegan a Cancún tapizar con candados el puente Nichupté, como llegó a ocurrir en París?
Si llegara a ocurrir, ¿qué harán las autoridades?
¿Tú, si fueres la máxima autoridad de la ciudad qué harías?