En los últimos años, Quintana Roo se ha convertido en tierra de oportunidades y de calidad de vida para muchas familias mexicanas, debido a la estabilidad social, la seguridad y la coyuntura para atraer inversiones para nuevos negocios generadores de empleo, afirmó el presidente del PRI en el estado, Raymundo King de la Rosa.
Agregó que Quintana Roo es el segundo estado del país donde la percepción es hacia el progreso, el bienestar social con trabajo y dedicación y la aprobación hacia la calidad de los servicios públicos, que posibilitan la calidad de vida que demandan los ciudadanos.
“No es casualidad que la pobreza no sea el problema número uno para los habitantes de Quintana Roo”, precisó el líder estatal del PRI.
El diputado federal señaló que las giras de trabajo del mandatario estatal Roberto Borge por el extranjero rinden frutos y prueba de ello es que se cierra el segundo trimestre de 2014 como la entidad mayor generadora de oportunidades de inversión, basando el esfuerzo conjunto entre empresarios de la industria turística y los tres órdenes de gobierno.
Señaló que en Quintana Roo hay un intenso trabajo que se desarrolla para atraer inversiones generadoras de empleo – como la gira de trabajo en las ferias turísticas internacionales- que se realizan para fortalecer a la industria turística.
Raymundo King aplaudió el esfuerzo del mandatario estatal Roberto Borge por llevar a la población servicios públicos – mayor infraestructura hospitalaria y educativa y el combate frontal hacia la pobreza- que mejoran la calidad de vida de las familias quintanarroenses, que ahora cuentan también con mayor facilidades para acceder a una vivienda,
Indicó que el crecimiento población en los últimos veinte años ha sido vertiginoso, por lo que es loable el gran esfuerzo que realizan los hombres y mujeres para que con su trabajo generen riqueza y bienestar por un Quintana Roo que les responde con mayor calidad de vida.
Subrayó que el compromiso de un gobierno comprometido del PRI es seguir trabajando con la sociedad para generar mayores condiciones de bienestar social, combatir la pobreza en las zonas indígenas del estado y evitar – como ya se está logrando- que en las zonas urbanas falten las oportunidades laborales.