Con protocolos que incluyen estrictas medidas de higiene y desinfección, el hotel Beachscape Kin Ha ofrece mayor seguridad a sus huéspedes en el tema de salud, pero también atractivas promociones para los visitantes locales.
Fernando Pardo, director del hotel, detalla los lineamientos que aplican en esta reapertura. Desde la llegada, el personal recibe a los huéspedes con la toma de temperatura y limpieza de equipaje, además de contar con tapetes desinfectantes. La recepción tiene señalética y todo tipo de marcas, separaciones e insumos indicados en los protocolos de higiene y sana distancia, tanto para el personal como para los visitantes.
Destacan los despachadores de gel desinfectante en todos los accesos, colocados estratégicamente, a igual que los letreros con instrucciones para el correcto lavado de manos en los baños. Las toallas se entregan perfectamente embolsadas y selladas y, una vez utilizadas, se dispone de un bote para depositarlas.
En el restaurante La Palapa, la capacidad permitida es de sólo el 50 por ciento y se respeta la distancia de 1.5 metros entre mesa y mesa. Los platillos salen cubiertos con campana, los cubiertos se presentan envueltos en una servilleta y, al igual que los vasos, el huésped los toma directamente, sin intermediarios.
Una de las ventajas del Beachscape Kin Ha, es el ser de los pocos hoteles pequeños que hay en la zona hotelera y el hecho de que tiene áreas al aire libre, lo que disminuye el riesgo de contagio que representa en los espacios cerrados.
De igual manera, tiene todo lo necesario para la desinfección y estricto control de higiene y sanidad, tanto en los lugares de encuentro como en las habitaciones. Para tranquilidad de los huéspedes, también se cuenta con personal médico para brindar atención en caso de que un visitante resulte sospechoso de portar covid-19.
El personal del hotel, debidamente protegido con lentes, cubrebocas, mascarillas y guantes, ofreció un recorrido por las instalaciones para demostrar y explicar cada una de las medidas de seguridad e higiene que se aplican. Después de registrar una salida, la habitación permanece ventilada antes de que entre la camarista para hacer la limpieza, cuidando de cambiar absolutamente todos los blancos, insumos y amenidades, además de la rigurosa limpieza del lugar.
De acuerdo con Fernando Pardo, el hotel reporta 20 por ciento de ocupación. La tarifa para el turismo local va de los mil 500 pesos por noche en habitación estándar para dos adultos y dos niños, promoción que estará vigente durante julio y agosto.
El ejecutivo invitó al público a disfrutar de “la mejor playa de Cancún porque es muy baja, no hay oleaje ni corrientes y los precios de los alimentos son módicos”.