El gobernador Roberto Borge Angulo anunció una inversión de 26 millones de pesos para renovar tuberías de agua potable en ocho supermanzanas de Cancún, en beneficio de unos 16 mil usuarios, y para la segunda etapa del drenaje sanitario en Alfredo V. Bonfil.
El jefe del Ejecutivo detalló que para las obras en la delegación benitojuarense se destinarán 11 millones 391 mil pesos, en beneficio directo de 3 mil 250 personas, como parte del Programa de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento en Zonas Urbanas (APASZU), que se suma a las acciones del Programa Nacional Hídrico (PNH 2014-2018), que impulsa el presidente Enrique Peña Nieto.
Asimismo, informó que la construcción del segundo cárcamo pluvial en la colonia Donceles 28 lleva un avance del 80 por ciento y se espera terminarlo en un mes. Con esa obra se duplicará la capacidad de desagüe en la temporada de lluvias.
—Los trabajos para reforzar el sistema de drenaje pluvial en esa zona de Cancún beneficiarán directamente a más de 5 mil 500 habitantes —explicó—. En esa obra la inversión es de 5.9 millones de pesos, para elevar la calidad de vida de las familias de la Donceles 28.
Por su parte, la titular de la CAPA, Paula González Cetina, explicó que, en el caso de las ocho supermanzanas de Cancún, sustituirán las tuberías de pvc por otras de polietileno de alta densidad, mediante un moderno sistema denominado “cracking”, que minimiza las afectaciones causadas por la apertura de grandes zanjas con el método tradicional.
—Este proceso permitirá reducir las fugas generadas por el deterioro de la tubería antigua y, en consecuencia, mejorará la presión en las tomas de agua potable de los domicilios —indicó.
La funcionaria precisó que la segunda etapa de la Red de Drenaje Sanitario en Alfredo V. Bonfil será similar a la primera, que está en proceso con avance de más del 60 por ciento, pues se instalarán 5 mil 600 metros lineales de tubería de 8, 10 y 12 pulgadas. “Para esta obra se destinaron 12.6 millones de pesos”, indicó.
Indicó que el segundo cárcamo en la Donceles 28 es una obra complementaria de las acciones realizadas en 2012 para cumplir las instrucciones del jefe del Ejecutivo en el sentido de solucionar el problema de encharcamientos severos que afectaban a los habitantes de ese sector en temporadas de lluvias y huracanes.
—Actualmente, con el cárcamo que opera en la zona, se tiene una capacidad de desagüe de 100 litros por segundo, pero con el nuevo cárcamo, que entrará en operación en unas semanas, será de 200 litros por segundo —concluyó.