Brasilia.— Roberto Alvim renunció ayer a su cargo como secretario de Cultura del gobierno de Jair Bolsonaro, tras la repercusión negativa de un discurso en el que pronunció una frase inspirada en declaraciones del ministro de propaganda nazi Joseph Goebbels. Por la tarde, el mandatario brasileño invitó a una popular actriz a que ocupara la posición vacante.
“Su pronunciamiento poco feliz, aunque se haya disculpado, hizo insostenible su permanencia en el gobierno”, informó Bolsonaro en un comunicado luego de la ola de indignación generada por las declaraciones del secretario. El polémico discurso fue grabado para un video oficial publicado la víspera sobre el lanzamiento de un nuevo Premio Nacional de las Artes.
“El arte brasileño de la próxima década será heroico. Estará dotado de una gran capacidad de involucramiento emocional y será igualmente imperativo, puesto que [estará] profundamente vinculado a las aspiraciones urgentes de nuestro pueblo, o entonces no será nada”, afirmó Alvim en la pieza.
La frase es muy similar a una del encargado de la propaganda de Adolfo Hitler, citada en el libro Goebbels: una biografía (2015), de Peter Longerich: “El arte alemán de la próxima década será heroico, será férreamente romántico, será objetivo y exento de sentimentalismo, será nacional, lleno de pathos, imperativo, o entonces no será”.
Alvim afirmó que se trató de un “error involuntario” y que desconocía el origen de la frase.
“No había ninguna mención al nazismo en la frase y no conocía su origen. El discurso fue escrito a partir de varias ideas ligadas al arte nacionalista que me trajeron asesores. Si hubiera sabido el origen de la frase, jamás la habría dicho”, dijo.
El video generó el rechazo de las altas autoridades, como los presidentes de la Cámara de Diputados y del Supremo Tribunal Federal (corte suprema). La Confederación Israelí de Brasil también consideró el discurso como “inaceptable”.
Tras la polémica, Bolsonaro invitó a la popular actriz Regina Duarte, conocida por sus posiciones de derecha, a que asuma como la secretaria de Cultura. “La administración pública es algo complicado y una cartera como la de Cultura aún más. Este es un país inmenso y continental, tiene muchos artistas, grupos, creaciones… y a mí me gustaría abrazarlos a todos”, afirmó. Admitió: “aún lo pienso”.