La ciudad de Seattle en Estados Unidos fue testigo de un misterioso espectáculo de luces ardientes que por momentos causó pánico y misterio entre sus habitantes. Y aunque en un principio se pensó que se trataba de meteoritos, sólo fue un cohete de SpaceX que se desintegraba tras regresar a la Tierra.
Las imágenes del impresionante espectáculo se hicieron virales en redes sociales. Pero después de esto, la empresa SpaceX, fundada por el empresario Elon Musk, explicó que se trataba de las parte que no se reutiliza de uno de los cohetes Falcon 9 de la compañía de fabricación aeroespacial y servicios de transporte.
Pero es claro que, en lo que los ciudadanos de Seattle se enteraban, todas las suposiciones posibles se consideraron. Eso sí, las luces hicieron un gran espectáculo que sólo algunos afortunados pudieron presenciar.
Buscan reusar todos los cohetes
La empresa que dirige Elon Musk es reconocida por su sentido social y su constante búsqueda por reutilizar las partes de las naves espaciales que construyen. Sin embargo, en el caso del Falcon 9, sólo se puede rescatar la mitad de la nave.
La primera etapa cuenta con motores que le permiten aterrizar en tierra y ser reutilizada en futuras misiones. La segunda etapa, no se reutiliza. Esto porque se orienta para que caiga en un área segura del Océano. Además, hay partes que se desintegran en su entrada de vuelta a la atmósfera.
SpaceX intenta que en el futuro se pueda recuperar también la segunda etapa de los Falcon 9. El costo de estos cohetes es de aproximadamente 62 millones de dólares. Si la compañía logra recuperar ambas etapas podría reducir el costo de cada misión en hasta un 10 por ciento.