Rusia y Bielorrusia decidieron prolongar los simulacros conjuntos debido a la escalada del conflicto en Donbass, informó este domingo el ministro de Defensa bielorruso Víktor Jrenin.
“Ante el aumento de la actividad militar cerca de las fronteras exteriores del Estado de la Unión y el agravamiento de la situación en Donbass, los presidentes de la República de Bielorrusia y de la Federación Rusa han decidido seguir comprobando las fuerzas de respuesta del Estado de la Unión”, señaló el alto funcionario.
Jrenin denunció que los países vecinos “están acumulando las armas más avanzadas de forma urgente y no programada”. “Se han modernizado las infraestructuras militares y de transporte. El número de ejercicios y operaciones incomprensibles cerca de las fronteras del Estado de la Unión se ha multiplicado”, precisó.
El ministro de Defensa bielorruso destacó que “hay un olor muy fuerte a pólvora” en la región y que “Europa se ve empujada a la guerra“.
Además, reiteró que el objetivo de los simulacros continúa siendo el mismo: “garantizar una respuesta adecuada y la desescalada de los preparativos militares de los enemigos” cerca de las fronteras del Estado de Unión.
La decisión de prolongar las maniobras se produce mientras la población de Donbass está evacuando hacia Rusia, al tiempo que se han intensificado los ataques al territorio de la región desde las posiciones de las fuerzas gubernamentales de Ucrania.