Ciudad de México, 9 de julio.- Este jueves se habría confirmado que el club Atlante decidió no continuar con los tratos que mantenía con la familia Cosío para jugar en él inmueble de la colonia ‘Nochebuena’ debido a que, presuntamente, se cayó la operación de compra-venta por la franquicia del Querétaro entre el Grupo Caliente y el grupo de empresarios propietarios de los Potros de Hierro que encabezan el promotor Greg Taylor y Gabriel Solares.
Un desacuerdo entre Taylor y Emilio Escalante, principal inversor para la compra de los Gallos Blancos, habría derivado en que Grupo Caliente no recibiera en su totalidad el pago por la franquicia.
Al parecer, Escalante habría aceptado invertir en la compra de la franquicia a cambio de que ésta fuera movida a la Ciudad de México para jugar como Atlante. Al no darse esta situación, llegaron las diferencias entre los socios que habría derivado en el retiro de Escalante y el derrumbe de la negociación con Grupo Caliente.
Así las cosas, los directivos azulgrana decidieron retirar la oferta para jugar en el estadio Azul, donde pagarían una renta de 400 mil pesos por partido. Cabe mencionar que, al día de hoy, aún no firmaban contrato con la administración del inmueble.
Con esto, el panorama del Atlante luce negro a pocas semanas de que arranque el torneo.