El diputado federal José Luis “Chanito” Toledo sostuvo que el PRI no ha impulsado la corrupción, pero también reconoció que la ha pasado por alto.
Al intervenir en una reunión de priistas en Felipe Carrillo Puerto para impulsar la renovación de la dirigencia estatal del PRI, que actualmente encabeza el diputado local Raymundo King de la Rosa, Toledo Medina afirmó que “la soberbia de algunos liderazgos a través de los años se ha traducido en despilfarro, autoritarismo y retraso”.
En la reunión participaron unos 200 priistas de varios municipios que en algún momento ocuparon cargos relevantes, como el gobernador Jesús Martínez Ross, el primero en la historia del estado.
También estuvieron el ex alcalde de Cancún Carlos Cardín Pérez, Víctor Viveros Salazar, dos veces candidato perdedor a la presidencia municipal de Benito Juárez, entre otras figuras.
El PRI emitió un comunicado con declaraciones del delegado de CEN, Manuel Andrade Díaz, quien advirtió que la dirigencia “no cederá a los chantajes”.
A través de su cuenta en Twitter, Toledo Medina advirtió que “solo habrá futuro para quienes decidamos romper con la vieja política”.
En respuesta, Raymundo King de la Rosa, presidente del PRI estatal, le dijo por la vía: “De acuerdo Chanito, no provoques la división. Todos jugamos y somos más. Escuchamos tu posición y la incluimos, abrazo”.
Martínez Ross manifestó su beneplácito por la reunión, porque representa un renacimiento del PRI.
“Soy de pensamiento, corazón y huevos, priista”, dijo el ex gobernador, quien a finales de los años 90 renunció al PRI e incluso fue dirigente estatal de Convergencia. Toledo Medina dijo que el PRI consolidó a Quintana Roo como uno de los estados con economía más fuerte, donde más empleos se generan es, sin duda, “un logro del que debemos sentirnos orgullosos”.
“Los resultados que hoy ponen a Quintana Roo como uno de los estados con economía más fuerte, donde más empleos se generan es, sin duda, un logro del que debemos sentirnos orgullosos”, dijo.
“Pero el partido es parte también de desaciertos que ponen en riesgo el éxito de nuestro estado y las familias quintanarroenses”, reconoció.
“No creo que el partido haya impulsado la corrupción, no, pero sí la ha pasado por alto y nos ha costado mucho a la militancia y a la sociedad”, enfatizó.
“La soberbia de algunos liderazgos a través de los años se ha traducido en despilfarro, autoritarismo y retraso”, agregó.
“En muchas ocasiones se han preocupado más por retener el poder que por trabajarlo a favor única y exclusivamente de la gente”, continuó.
“Es así que las alianzas partidistas nos han dado triunfos pero en la ecuación final nos ha restado mucho, y esque cuando en una alianza no hay un proyecto social en común, nos vuelven rehenes”, asentó.