Beirut.— Muchos países comenzaron ayer a enviar ayuda a Líbano, donde la víspera dos gigantescas explosiones sacudieron Beirut, causando al menos 135 muertos y más de 5 mil heridos.
El primer ministro libanés, Hasan Diab, lanzó el martes un “llamado urgente a todos los amigos y a los países hermanos”.
Francia envió ayuda en dos aviones militares, según el Elíseo. El presidente Emmanuel Macron anunció en Twitter el envío de un destacamento de seguridad civil y de “varias toneladas de material sanitario”. Además, se informó que el mandatario viaja hoy al Líbano para reunirse con las autoridades y evaluar la situación.
Países del Golfo, algunos de los cuales mantienen estrechas relaciones con Líbano, ofrecieron respaldo. Kuwait anunció la llegada de un avión con “ayuda médica”. El emir de Qatar, el jeque Tamim bin Hamad Al Thani, llamó al presidente libanés Michel Aoun para darle el pésame, según la agencia de prensa oficial QNA, que añadió que enviarán hospitales de campaña al Líbano.
El príncipe heredero de Abu Dabi, Mohamed Bin Zayed, tuiteó la “solidaridad” de Emiratos Árabes Unidos.
Arabia Saudita declaró que seguía la situación con “gran preocupación” y ofreció su pésame a las víctimas.
La Media Luna Roja iraní envió a Beirut un cargamento de 95 toneladas de ayuda humanitaria, equipo médico y un hospital de campaña, dijo el presidente del organismo, Karim Hematí. Israel pidió “superar el conflicto” al proponer “una ayuda humanitaria y médica” para Líbano.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, prometió “ayuda humanitaria en todos los ámbitos, especialmente en el ámbito de la salud”. El rey de Jordania, Abdalá II, ordenó la preparación de un hospital militar de campaña para enviar a Líbano. El presidente egipcio, Abdel Fatah al Sisi, dirigió su “pésame” a los libaneses.
Estados Unidos también ofreció ayuda después de la “horrible explosión”. La OMS dijo que “comenzó a enviar kits de traumatología y cirugía”.