CHETUMAL, 20 de noviembre (Mario Castillo).— El encarecimiento de los productos y servicios hacia los consumidores, es uno de los mayores impactos negativos que van a derivar de la reforma a la Ley General del trabajo, que va encaminada a reducir la semana laboral de seis a cinco dias, advirtió la secretaria del Trabajo y Previsión Social en Quintana Roo, Flor Ruiz Cosío.
La medida obliga a los patrones del sector turístico y comercial a otorgar un día más de descanso a sus empleados, con el consecuente y significativo gasto de tener que contratar a quienes los suplan en los dos días que ahora tendrán de descanso sus trabajadores, dijo la funcionaria estatal.
Con esto ultimo, apuntó Flor Ruiz que se incrementaría la nómina patronal por concepto de sueldos, así como también en cuanto a prestaciones, como el caso de la seguridad social que deberá cubrirse en favor de los obreros eventuales o suplentes.
Las pérdidas también serán para los empleados a quienes un segundo día de descanso semanal les impactará en dejar de cobrar sus propinas, las cuales en ocasiones son tres o hasta cuatro veces mayores al salario que cobran por su día laboral.
Sumado a que al descansar un día más, los trabajadores caen en riesgo de incumplir con sus metas de trabajo y perder sus bonos de productividad, por ventas o comisiones algunas otras prestaciones, advirtió la titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, en abierto rechazo a dicha reforma legal.