Cancún, 20 de agosto (infoqroo).-Aguakan, empresa concesionaria de los servicios de agua, alcantarillado y saneamiento, ratificó hoy su compromiso de brindar un servicio “impecable” para que el agua potable llegue a hogares, hoteles y negocios, pero aclaró que “a veces” hay factores externos que pueden interferir en sus procedimientos, como las fallas y/o bajas en el suministro eléctrico.
Orlando Trejo, gerente de Recursos Naturales y Abastecimiento, explicó que su principal función es procurar procesos certeros para que todos los hogares cuenten con agua limpia y lista para su consumo.
El transporte de agua potable en Aguakan abarca desde la extracción de los pozos hasta el rebombeo que traslada el flujo hacia los tanques y de allí a los miles consumidores, indicó. El principal reto es lidiar con la estructura natural de Quintana Roo, debido a que la península de Yucatán es plana, sin montañas que contribuyan a incentivar el traslado de agua usando la gravedad.
Eso obliga a utilizar sistemas de presurización que funcionan con energía eléctrica para “empujar” el agua potabilizada hacia su destino final con el consumidor, añadió. Sin embargo, si hay fallas y/o bajas en el voltaje eléctrico, el abastecimiento de agua potable se torna lento o se detiene por completo.
De acuerdo con la información, dependiendo del tipo de falla eléctrica (cambio abrupto de voltaje o una baja definitiva), los equipos de transporte de Aguakan pueden requerir de un reinicio de operaciones parcial o completo y lo mismo ocurre con la reapertura de pozos.
Si bien luego de encontrar y resolver el problema se trata de que el transporte de agua potable se vea afectado lo menos posible, el reabastecimiento no suele ser inmediato. “Si abrimos los pozos y las llaves demasiado rápido, ocurre un fenómeno físico denominado “Golpe de Ariete”, el cual causa una sobrepresión que puede dañar las líneas de distribución permanentemente”.
El entrevistado indicó que los equipos se deben reiniciar poco a poco, en un proceso que lleva hasta seis horas y que eso se puede reflejar en la presión o en el suministro total de agua.
Cabe señalar que, para evitar graves afectaciones a la población, Aguakan cuenta con un Centro de Control de Operaciones (CCO) en el que se monitorea la presurización de las tuberías y el debido llenado de los tanques de rebombeo. En añadidura, la comunicación con los proveedores de energía es constante y cercana en todo momento.