Un juez ordenó este viernes al gobierno de Estados Unidos no aplicar parte de un decreto del presidente Donald Trump, que habría impedido que a partir del 12 de noviembre funcionara la popular aplicación TikTok en el país.
Tres internautas que reciben remuneraciones por sus servicios en TikTok habían acudido a un tribunal de Pensilvania solicitando la suspensión de la parte del decreto que prohíbe a las empresas estadounidenses brindar servicios esenciales a la aplicación, como el alojamiento en línea.
Como resultado de una denuncia diferente, un juez de un tribunal de Washington impidió a finales de septiembre que la administración Trump obligara a las plataformas de descarga de aplicaciones móviles a retirar TikTok, subsidiaria de la empresa china ByteDance.
En eso consistía el primer paso de la aplicación del decreto presidencial del 6 de agosto, en el que Trump evoca el riesgo de transferencia de datos de usuarios a China y describe a TikTok como una amenaza para la “seguridad nacional”.
El mandatario exige que la red social pase a ser propiedad de una compañía estadounidense.
En ambos casos, los jueces consideraron que existían buenas probabilidades de demostrar ante los tribunales que Trump se había excedido en su autoridad.
También consideraron que TikTok, una aplicación muy popular entre los jóvenes para compartir videos cortos, gozaba de la misma protección que los medios de expresión o información como las películas, las fotografías o las agencias de noticias.
Para responder a las preocupaciones del gobierno, TikTok preparó un proyecto de acuerdo con el cual creará una nueva compañía que incorpore a Oracle como socio tecnológico en Estados Unidos y Walmart como socio comercial.
Las discusiones están aún en curso. Esta es una decisión judicial tomada por un tribunal distinto del que también paralizó temporalmente las restricciones gubernamentales a la plataforma en septiembre y que supone, de facto, bloquear las intenciones del ejecutivo estadounidense de restringir el uso de la aplicación el próximo 12 de noviembre.
La jueza Wendy Beetlestone ha paralizado las medidas encaminadas a hacer la aplicación inutilizable al restringir su alojamiento en la red y el envío de contenido, entre otras limitaciones, según el portal tecnológico especializado ‘The Verge’.
Con esta decisión, la Justicia estadounidense ha escuchado los argumentos de tres creadores de contenido en la plataforma que interpusieron la demanda en la aseguraban que el cierre de la plataforma supondría el fin de su medio de vida y que los contenidos creados debían preservarse.
En su resolución, Beetlestone ha equiparado los vídeos de la plataforma a “películas”, “ilustraciones”, “fotografías” o “la portada de un portal de noticias”, por lo que considera que están protegidas al mismo nivel que estos ante decisiones ejecutivas.