La suspensión de los trabajos de relleno y aplanado del predio donde se pretende construir el polémico Dragon Mart podría ser una estrategia de los desarrolladores para modificar el proyecto, con el fin de no impactar zonas de la propiedad en las que hay presencia de vegetación de jurisdicción federal.
El delegado de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, Raúl Omar González, dijo que los promoventes del Dragon Mart pretenden evadir la disposición de tramitar la manifestación de impacto ambiental con el argumento de que la Profepa inspeccionó el predio “El Tucán” en dos ocasiones, sin que haya encontrado irregularidad alguna.
Según esas mismas resoluciones, que dieron pie a un amparo para que los trabajos pudieran continuar sin permiso, determinó que el terreno había sido previamente impactado para la extracción de material pétreo, por lo que la vegetación que se encuentra en el predio es la denominada acahual, que lo hace materia de observancia estatal y no federal.
Sin embargo, el funcionario de la Profepa dijo que en otras inspecciones se encontró vegetación de jurisdicción federal en zonas donde pretendían extender el relleno y aplanado del predio.