Estados Unidos, 5 de febrero.- El líder opositor venezolano Juan Guaidó sostuvo el miércoles una reunión largamente esperada con el presidente estadunidense Donald Trump, un momento culminante de una gira internacional dirigida a aumentar el apoyo a su campaña para derrocar al mandatario venezolano Nicolás Maduro.
Trump salió para recibir a Guaidó en la Casa Blanca mientras había soldados alineados en la entrada del jardín sur, y luego lo escoltó a la Oficina Oval para una reunión privada. En la víspera, Guaidó fue invitado al discurso del Estado de la Unión del presidente estadunidense.
Los legisladores aplaudieron mientras Trump presentó a Guaidó como el líder “verdadero y legítimo” de Venezuela y llamó a Maduro un “tirano”.
La Casa Blanca dijo que la visita de Guaidó fue una “oportunidad para reafirmar el compromiso de Estados Unidos con el pueblo de Venezuela”. Los líderes iban a discutir cómo Estados Unidos puede trabajar con Guaidó para “agilizar la transición democrática en Venezuela que pondrá fin a la crisis actual”, señaló la residencia presidencial.
El vicepresidente Mike Pence se reunió con Guaidó en el Capitolio antes de partir hacia Pensilvania. También estuvieron presentes los senadores Marco Rubio y Rick Scott, ambos republicanos de Florida.
Estados Unidos y casi 60 países más han afirmado que la elección de 2018 de Maduro es ilegítima y que Guaidó, como presidente de la Asamblea Nacional, debería ser nombrado presidente interino bajo la Constitución venezolana. Estas naciones responsabilizan a las políticas socialistas de Maduro de una crisis política y económica que amenaza la estabilidad de la región.
Maduro, sin embargo, sigue en el poder, habiendo enfrentado un levantamiento militar fallido, una breve reanudación de las protestas multitudinarias contra el gobierno y las sanciones y otros esfuerzos por parte de Estados Unidos para obligarlo a dejar el cargo.
Guaidó salió de Venezuela en un momento en el que le quedaban pocas opciones y batallaba para atraer números significativos de personas a las calles para manifestarse contra Maduro.
El ímpetu de Guaidó tuvo un ligero repunte a principios de enero, cuando fue visto en imágenes ampliamente publicadas en las que aparecía discutiendo con la policía antidisturbios mientras trataba de saltar una valla e ingresar al edificio de la Asamblea Nacional.