Cancún, 29 de septiembre (Gilda Piña)- El problema de la contaminación de los cruceros es un problema añejo que tiene graves consecuencias en los cuerpos de agua del territorio quintanarroense, explicó Aracely Ramírez, representante en el estado del organismo global Ocean Conservancy.
“Esto no es nuevo, viene de hace mucho tiempo, hay leyes que restringen todo esto, pero desafortunadamente en mar abierto, no hay una vigilancia como tal, todo esto se da y lo ves en lugares como Sian Ka´an que es donde recala todo ese tipo de residuos, y obviamente parte es de ahí”.
Dijo que es difícil cuantificar la cantidad de desechos que se generan en estos hoteles flotantes, porque este tipo de organizaciones no tienen una periodicidad, es lo que se va a acopiando, lo que el municipio puede ir haciendo y los resultados que arrojan las campañas de limpieza.
“Es como ir a Isla Contoy, tú te encuentras una cantidad de basura en un lugar que es un lugar en el que la gente no pernocta, pero es arrastrada por las corrientes marinas y, sin embargo, la cantidad de desechos es impresionante, en la última limpieza, acopiamos 100 kilos de basura”, explicó.
Indicó que para contabilizar la basura que generan los cruceros, se necesitarían embarcaciones y muchos otros recursos, por lo que esto se sale completamente de las manos de organizaciones ambientalistas.
“De que siembre ha habido contaminación, Siempre ha habido, pero para nosotros es difícil cuantificarlo”, explicó.
Cabe aclarar que la Ley General de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente en el artículo 142 dice que queda prohibido bajar basura o desechos de cruceros, sin embargo, es frecuente que activistas de Cozumel denuncien este tipo de acciones.
De acuerdo a un estudio realizado en 2020 denominado “Impacto de la Contaminación por Plástico en Áreas Naturales Protegidas Naturales” y elaborado por Greenpeace y la UNAM, el Caribe mexicano presenta un número elevado de desechos plásticos en el fondo marino, que tiene relación directa con las actividades de los cruceros.