Las comisiones unidas de Justicia y de Salud de la Cámara de Diputados aprobaron esta noche el dictamen de ley federal para la regulación del cannabis, que prevé el consumo “con fines lúdicos” de la marihuana.
El dictamen se aprobó con 17 en favor, cuatro en contra y cuatro abstenciones en la Comisión de Justicia y 17 en favor, 7 en contra y seis abstenciones en la de Salud, y se envió a la Mesa Directiva para que lo incluya en la agenda de la sesión de mañana.
Ambas comisiones incluyeron, de última hora, nuevos cambios a la minuta del Senado.
Entre otros, se modificó el objeto de la ley, para definir que la producción en casa habitación será para uso personal “con fines lúdicos”, y no con fines de “uso lúdico”.
También se agregó a la definición de cáñamo o cannabis no psicoactivo como las plantas del género cannabis, “incluyendo sus derivados, que puede producir fibras y no produce ningún efecto psicoactivo y cuyo contenido de THC (tetrahidrocannabinol es inferior al uno por ciento”.
Asimismo, las comisiones agregaron la posibilidad de importar “concentrados de cannabis psicoactivo para vaporización o usos similar o equivalente, incluidos aquellos para su uso en sistemas electrónicos o alternativos de administración de sustancias inhaladas, cigarros electrónicos, dispositivos de calentamiento, dispositivos vaporizadores y dispositivos de vapeo…”
Aval sobre la Ley a una Vida Libre de Violencia
Asimismo, fue aprobado con 429 votos a favor, cero en contra y una abstención, el dictamen para adicionar la fracción XXIII, y recorrer las subsecuentes, al artículo 49 de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
La Diputada por Quintana Roo Mildred Concepción Ávila Vera, subió a la máxima tribuna de la Nación para referirse al dictamen aprobado por el pleno, el cual adiciona la fracción XXIII, recorriéndose las subsecuentes del artículo 49 de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
La legisladora morenista fijo su postura ante el Pleno: “proteger y salvaguardar la vida y la integridad de las mujeres y las niñas en México, es una tarea que nos hemos tomado como prioridad en esta Legislatura. Y es en ese sentido que impulsamos esfuerzos para que esta tarea se instale en el más alto nivel de importancia de cualquier estrategia nacional de seguridad, son las y los agentes policiales las autoridades de primer contacto que acuden a numerosas llamadas de auxilio por violencia familiar, violencia sexual y otros tipos de violencia de género.
“Son quienes tienen que ejecutar y hacer cumplir las órdenes de protección que la autoridad ministerial o judicial ha generado. Muchas veces en la capacidad operativa o la preparación necesaria para interactuar con víctimas de violencia de género o con sus victimarios. Además, con el desconocimiento sobre las normas esenciales que prohíben la conciliación en estas violencias.
“La violencia contra las mujeres tiene un acelerado crecimiento y lo muestran las llamadas de emergencia relacionadas con incidentes de violencia contra la mujer, según las cifras del secretariado ejecutivo del sistema nacional de seguridad pública”, dijo la Legisladora.
“En 2016, 92 mil 604 llamadas de auxilio por incidentes de violencia contra la mujer; en 2020 el año cerró con más del doble de llamadas 260 mil 067 llamadas de auxilio, un crecimiento de 180 por ciento en tan solo cuatro años.
“En consonancia con el incremento llamadas de emergencia por violencia contra las mujeres, el feminicidio también aumentó. Con 411 feminicidios, cinco años después en 2020, 939 feminicidios registrados lo anterior se traduce en 128 % el número de feminicidios.
“A pesar de las altas cifras oficiales de violencia que se registran contra las mujeres, éstas siguen sin reflejar la realidad que enfrentan, siguen siendo cientos de mujeres las que aun cuando han sufrido muchas veces violencia grave, no se atreven a denunciarla, especialmente cuando ocurre en el ámbito familiar o de pareja, por qué no denuncian, por miedo, por falta de confianza en las autoridades, o por la pérdida de tiempo porque no pasa nada”.
Apuntó Ávila Vera que, “por lo anterior es que resulta necesario que en las autoridades federativas y municipios las autoridades policiales, incluyendo aquellas que tienen llamadas en líneas de emergencia, cuenten con la capacidad, la disposición y las habilidades para distinguir las distintas violencias de género que pueden minimizarse y clasificarse erróneamente como riñas o personas ebrias rijosas, lesiones dolosas o incluso como una supuesta ejecución, debido a la falta de perspectiva de género.