CHETUMAL, 16 de marzo.— El gobernador Carlos Joaquín afirmó que “vale la pena presumir” el manejo financiero que tiene su administración y descartó que se vaya a heredar deuda de corto plazo al siguiente gobierno.
“Es una mentira lo que algunos dicen de que vamos a convertir en deuda de largo plazo los créditos de corto plazo que se tuvieron que contratar para enfrentar la pandemia”, enfatizó durante el programa semanal de los martes en los que da a conocer información relacionada con el COVID y la reactivación económica.
Al hablar Yohanet Torres Muñoz, quien renunció a la secretaría de Finanzas para ser candidata plurinominal de diputada local, el Gobernador la elogió ampliamente por su preparación y capacidad profesional.
“Es una mujer muy bien preparada con dos doctorados, honesta, trabajadora, conoce muy bien los temas fiscales y financieros, ha sido punta de lanza para mantener este control financiero de Quintana Roo”, subrayó.
Carlos Joaquín dijo que Yohanet Torres buscó su propio espacio político, recibió invitaciones de partidos políticos para participar y al finar aceptó.
“Pero no se trata de una acción para proteger irregularidad alguna. No hay nada de eso de que va a ser tapadera, de que evitará que se vea una supuesta corrupción… Eso es pura mentira, no tiene nada que ver con la realidad y menos con la realidad financiera”, sostuvo.
Dijo que a su gobierno, junto con Yohanet Torres, le tocaron momentos difíciles, sin apoyos adicionales por parte de la federación para enfrentar la pandemia.
“El 35% de nuestro presupuesto son ingresos propios que se generan a través de los impuestos al hospedaje y la nómina, dos de los rubros que más afectación tuvieron en 2020”, dijo.
“Poco se hablan de esos temas, pero nunca dejamos de pagar la deuda completa de los trabajadores del gobierno del estado, no se les dejó de pagar prestación alguna y tampoco se despidió a nadie”, recalcó.
Agregó que la caída en la recaudación y las necesidades generadas por la pandemia provocaron un déficit de $5,000 millones de pesos, por lo que se tuvieron que recurrir a créditos de corto plazo para cubrirlo.
Precisó que esos créditos serán cubiertos en su totalidad en mayo próximo, de modo que no se heredarán a la siguiente administración.
“Es un trabajo financieramente bien hecho. No hay nada que tapar, eso es una mentira”, insistió.
Recordó que su gobierno heredó una deuda bancaria de $20,000 millones de pesos, en su mayor parte contratada con intereses muy altas, además de $6,000 millones de pesos en pasivos con proveedores.
“Mucho de esos $6,000 millones eran retenciones hechas a trabajadores que no se enteraron a las instancias correspondientes por la irresponsabilidad de la administración anterior”, indicó.
“Hoy las condiciones son diferentes, no hay necesidad de pedir al Congreso aumentar la deuda de largo plazo. Es mentira de que eso va a ocurrir”, indicó.
Por su parte, Ricardo Román Sánchez, encargado del despacho de Sefiplan dijo que el saldo de los créditos de corto plazo es de $1,200 millones de pesos y se saldará en mayo, un mes antes de lo que establece la ley que ordena liquidar ese tipo de deudas tres meses antes de concluir la administración, a fines de septiembre próximo.